La nueva oleada de coronavirus y su impacto directo sobre el turismo ha reducido en un punto las previsiones de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de la Comunidad Valenciana para el próximo año. Así lo estima el Observatorio de BBVA Research, que en cambio amortigua en un 0,3% la caída para este año gracias al avance de la actividad industrial y agroalimentaria.

El fuerte impacto que la pandemia de covid-19 está teniendo sobre el turismo viene lastrando desde el primer momento la economía de la Comunidad Valenciana, territorio que tiene una clara dependencia de este sector. Pues bien, según los informes del BBVA, esta situación se va a prolongar durante el próximo año. El observatorio de la entidad bancaria ha tenido que corregir a la baja sus previsiones iniciales de crecimiento del PIB en un punto, de manera que el aumento quedará finalmente situado en el 6,3%.

La razón, según señala a este diario Pep Ruiz de Aguirre, economista principal de BBVA Research, hay que buscarla en la segunda oleada del virus. «Los datos -indica- están siendo ya en estos momentos menos favorables debido a los rebrotes que se están registrando, lo que aumenta la incertidumbre a la que se enfrentan empresas y familias. Nos encontramos en un contexto de desaceleración en Europa, a lo que hay que unir el agotamiento de los estímulos a la demanda aplicados durante este año. Todas estas circunstancias nos han hecho revisar a la baja las expectativas de recuperación de 2021 en el conjunto de España».

En el caso de la Comunidad Valenciana, el elemento principal que ha provocado esta revisión a la baja, según el experto, obedece a que «el turismo extranjero seguirá de capa caída, mientras que el nacional, que había funcionado mejor de lo esperado inicialmente, también se resentirá por el temor a los contagios».

La situación, incluso, podría ir a peor si se retrasa la implementación de los planes asociados a los fondos europeos, pierden credibilidad las administraciones públicas por suspender las reglas fiscales o si se aplican esa inyección procedente de la UE de forma ineficiente. Sin embargo, se añade desde BBVA, si se consigue una pronta vacuna, se incrementa la eficiencia del gasto de los citados fondos y se aplican reformas que mejoren el potencial de crecimiento de la economía española, el escenario para 2021 podría ser sustancialmente más positivo.

Por lo que respecta al ejercicio actual, el observatorio también ha revisado sus previsiones, pero en este caso al alza. El buen comportamiento de la industria y el sector agroalimentario, basado en las exportaciones, propiciará según la entidad bancaria que la caída del PIB en la Comunidad se amortigue en un 0,3%, para quedar situada finalmente en el 11,6%. De cualquier forma, el territorio valenciano será de los que experimenten mayores caídas, sólo superado por los que registrarán Baleares, Canarias, Cataluña y Andalucía. La situación, de cumplirse las previsiones, se invertirá en 2021, toda vez que la valenciana será la comunidad que más se recupere, por detrás de las islas.

En cuanto al caso concreto de la provincia de Alicante, el observatorio destaca como dato positivo el aumento del 3,4% en las afiliaciones a la Seguridad Social en el tercer trimestre, con las manufacturas, la construcción y los servicios públicos como los sectores que se han mostrado más activos en este sentido.