Las patronales empresariales de Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana e Islas Baleares, como antiguos territorios de la Corona de Aragón, han reclamado en su Decálogo por la Competitividad un "nuevo modelo de financiación de las comunidades autónomas que garantice un mayor trato de igualdad entre todos los ciudadanos de España".
Ha sido también uno de los puntos destacados en las declaraciones a los medios de comunicación antes del plenario de la Cumbre Empresarial, que ha reunido en Zaragoza este jueves a los presidentes de las organizaciones empresariales, así como los presidentes de sus respectivas Comunidades y la consejera de Presidencia catalana.
El anfitrión de la jornada, el presidente de CEOE Aragón, Ricardo Mur, ha pedido un "un modelo justo y equitativo para todos"; la presidenta de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB), Carmen Planas, ha pedido "inversiones justas" para llegar a la "igualdad de condiciones"; mientras que el presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), Salvador Navarro, ha hablado de acabar con la "crónica infrafinanciación" que sufre su región.
"Esta no es una pelea de uno contra todos, sino que tenemos la misión de diálogo: nosotros debemos aportar los problemas y la política debe dar una solución", ha dicho el representante valenciano.
Por su parte, el presidente de Foment de Treball, Josep Sánchez Llibre, ha puesto sobre la mesa algunas de las peticiones de los empresarios catalanes, como la ampliación del Aeropuerto del Prat, para la cual ha pedido a sus colegas "máxima complicidad", y el esfuerzo para la candidatura de los Pirineos a los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030.
A esta "reivindicación conjunta" se ha sumado el aragonés Mur, quien ha apostado por el impulso de "un proyecto olímpico donde Aragón y Cataluña vayan juntos, para promover las inversiones necesarias en el territorio".
El presidente de la CEOE en Aragón también ha detallado algunas de las peticiones comunes, como una reforma con visión estratégica de los precios a la electricidad o soluciones frente al alza de las materias primas o la crisis de abastecimiento de componentes.
Desde las Islas Baleares, la representante de los empresarios ha reivindicado poder competir con las del resto de la península con un régimen fiscal especial y ha recalcado que en su Comunidad la crisis del covid se ha traducido en una pérdida de casi un 30% del PIB, debido a la fuerte dependencia del turismo.
Por su parte, Navarro también ha manifestado algunas peticiones muy concretas para su territorio: la necesaria ampliación del Puerto de Valencia, el "número 1" del Mediterráneo -imprescindible para los intereses de España y de Europa"-, o la mejora de comunicaciones con Aragón o Cataluña.
Pero si en algo han coincidido los cuatro representantes de las organizaciones empresariales es en la importancia del "diálogo social" y el fundamental papel de las empresas para la recuperación económica.
Para avanzar juntas hacia este objetivo, las cuatro han apostado por "estrechar lazos", conscientes de que juntas representan un 32 % de la población total de España, el 34 % del PIB y relaciones comerciales que superan los 35.800 millones de euros.
Colaboración
Por su parte, los representantes de los ejecutivos autonómicos de estos cuatro territorios han aprovechado el encuentro para escenificar su unidad en la búsqueda de alianzas para impulsar sus economías y superar también las divergencias políticas. En el acto han participado el presidente de Aragón, Javier Lambán; el de la de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, y Baleares, Francina Armengol, y en representación de Cataluña, la consejera de Presidencia, Laura Vilagrá.
Lambán ha remarcado que los cuatro territorios representan "una verdadera comunidad económica", dada la intensidad de sus intercambios económicos, sociales y culturales, y planificar el futuro cada uno por su parte sería "un error".
Y aunque ha admitido que esta cumbre no hará "desaparecer" los problemas y divergencias políticas que existen en el país, esta iniciativa del empresariado, centrada en objetivos concretos como la relación económica y asumiendo una función "patriótica", es posible que se empiecen a encontrar caminos para solucionar los grandes problemas del país.
Problemas como la reforma de la financiación autonómica con posiciones divergentes de los presidentes hoy reunidos, aunque ha apuntado que en otros foros quizá se encuentren soluciones, y otros de más magnitud política en referencia a Cataluña, y en su opinión, un encuentro como el de hoy es una buena ocasión para empezar a resolverlo, recurriendo a lo concreto y sacándolo estrictamente del ámbito político. "Y nada hay más concreto que lo económico", ha aseverado.
Por su parte, Puig ha insistido en que "es el tiempo de la cooperación", de la capacidad de sumar sinergias para aumentar la competitividad de las empresas y de generar "futuro" en los cuatro territorios, que comparten historia e intereses, en algún caso diversos, aunque con una voluntad clara de trabajar conjuntamente para alcanzar una prosperidad "hacia la que no hay atajos".
El president ha incidido en las consecuencia de la pandemia y en las nuevas incertidumbres por los costes energéticos y de las materias primas y en la necesidad, ante este nuevo escenario, de trabajar conjuntamente.
"No hay fronteras en este espacio" y la realidad, ha dicho Puig, es que tienen una oportunidad extraordinaria de cooperar desde el punto de vista económico y con una componente de visión territorial de España y de mejorar la "convivencia y la coexistencia".
La presidenta de Baleares también ha alabado la apuesta de las patronales de los cuatro regiones por este foro de diálogo junto con los gobiernos autonómicos con el fin de compartir estrategias y objetivos de presente y futuro tras una pandemia "muy complicada" con vistas a reactivar la economía, en la que es fundamental el trabajo conjunto entre lo público y lo privado.
Armengol ha reivindicado el diálogo social en su región a lo largo de los meses de pandemia, como le consta también en Aragón, y el trabajo actual hacia un pacto para la reactivación económica, con los fondos europeos como gran oportunidad para buscar sinergias con el empresariado de las cuatro comunidades, con el trabajo conjunto de los gobiernos respectivos en proyectos estratégicos en turismo, la economía verde y transición ecológica justa.
En ese sentido, ha comentado que Baleares será el primer territorio del país en producir hidrógeno verde con una planta que se inaugurará en enero o febrero de 2022 en una estrategia de economía verde que comparten con las otras tres autonomías y de la que pueden salir proyectos.
La consejera de Presidencia, Laura Vilagrá, ha resaltado el motor económico de "primer orden" que representan el eje del Ebro y el Mediterráneo, el más dinámico del sur de Europa, y destacado el importante "pool" de empresas que configuran los cuatro territorios, que suman el 34 % del PIB y el 32 % de la población y son pioneros en la atracción de inversiones extranjeras y el 38,8 % de la inversión en innovación.
"Son ejemplos que nos invitan al optimismo", ha apuntado Vilagrá, quien ha enfatizado el objetivo compartido de recuperación económica y social y ha mostrado la voluntad del Gobierno catalán de cooperar en cuestiones económicas, sociales, ambientales, de movilidad, la reindustrialización, la transición ecológica y el turismo y su desestacionalización.
En ese sentido, ha considerado imperioso romper la movilidad radial y ha apostado por la cooperación en los fondos europeos, por una fiscalidad más justa entre territorios y por potenciar la reindustrialización de las cuatro regiones
