La pujanza del nuevo sector tecnológico de la provincia quedó claro ayer durante la celebración de la feria de empleo que la Cámara de Comercio de Alicante y Distrito Digital organizaron de forma conjunta en las instalaciones de este último organismo, en la antigua Ciudad de la Luz. Un evento donde los reclutadores de hasta una treintena de empresas vinculadas al hub tecnológico impulsado por el Consell desplegaron sus mayores encantos para tratar de captar a aquellos perfiles que más les interesaban de entre los más de 400 jóvenes estudiantes o recién licenciados que acudieron a la cita en busca de una oportunidad.
Y las diferencias estaban bastante claras. Mientras que los licenciados en Psicología o Biología que acudieron a la cita lamentaban las dificultades con las que se encontraban para incorporarse al mercado laboral tras la carrera, los estudiantes de las ramas de informática de FP o de carreras tecnológicas se acercaban a los estands con la actitud clara de saber que serían ellos los que elegirían la empresa en la que quieren trabajar.
«Venimos a ver qué ofrecen las empresas», dejaba claro Djessy Czaplicki, un estudiante del último curso del Grado de Desarrollo de Aplicaciones Multimedia del Instituto Pere María Orts de Benidorm, en busca de sus primeras prácticas. Tanto él como sus compañeros, Daniel Zahinero y Matías Pérez, tenían muy claro que el sueldo es importante, pero, ni mucho menos, lo único que les importa.
Para ellos es fundamental que la empresa les siga formando y especializando en las distintas tecnologías que surgen y, sobre todo, que se dediquen a algo que realmente les guste y les motive. «A mí lo que me interesa es la parte de diseño gráfico más que el backend (la programación pura y dura), por lo que busco alguna empresa de videojuegos o que haga diseño web», explicaba el último de ellos, que dejó la Universidad para apuntarse a la FP en busca de una formación más práctica que la que ofrecen los campus en esta materia.
Este tipo de perfiles se ha convertido actualmente en auténtico «oro» para las empresas tecnológicas, que sufren por la falta de profesionales especializados. Aunque la situación en Alicante no llega a la que se registra en otros polos tecnológicos más consolidados, la llegada de grandes compañías al calor de iniciativas como el propio Distrito Digital o Alicante Futura empieza a «calentar el mercado», según explica Amador Sobrino, de la tecnológica Orizon. «Ahora, con el teletrabajo, nos estamos encontrando con que muchas empresas alemanas o incluso de Abu Dabi están haciendo ofertas para captar trabajadores aquí. Les pagan un buen dinero y no tienen que moverse de su casa», explica Sobrino.
El resultado es que en algunos perfiles -no todos- los sueldos empiezan a dispararse. Así, jóvenes que apenas cuentan con experiencia, pero que han pasado algunos meses en una gran compañía especializándose, no dudan en reclamar entre 40.000 y 50.000 euros anuales.
Y la demanda no parece agotarse. «Estamos incorporando a gente constantemente, tanto de la Universidad como de FP», explicaba Silvia Pérez, de la multinacional NTT Data, la antigua Everis. Es una de las tecnológicas con mayor plantilla en Alicante, donde cuenta con un centro en la Playa de San Juan, más centrado en desarrollo de proyectos, y otro en la avenida de Óscar Esplá, en Alicante, en la sede del Sabadell, donde realizan tareas más administrativas para la entidad.
Accenture, Aire Networks, Dodit, FacePhi, Indra, Sopra Steria, Verne, Teralco o Huawei fueron otras de las compañías presentes en el certamen para mostrar la oferta de empleo de que disponen. En este sentido, cabe recordar que uno de los proyectos estrella para el próximo año de Distrito Digital será la creación de una gran plataforma para formar a nuevos profesionales, según anunció el CEO de este organismo, Antonio Rodes, hace unos días.
Barreras de entrada
La actitud optimista de los estudiantes de informática contrastaba con el panorama que pintaban los recién licenciados en otras especialidades, para los que las barreras de entrada al mundo laboral siguen siendo elevadas. «Es muy complicado. Para cualquier puesto te piden experiencia, pero si acabas de terminar la carrera es imposible tenerla. Y eso por no hablar de los mil requisitos que exigen», señalaba la bióloga Melisa Gómez.
Junto con los estands de las empresas, el evento incluyó charlas y talleres para ayudar a los que lo tienen más difícil a la hora de encontrar empleo. Así, la Cámara de Comercio realizó uno sobre búsqueda de empleo a través de las redes sociales y presentó su Bolsa de Empleo y Talento, con la que quiere conectar a los jóvenes con las oportunidades de empleo que se dan en la provincia.
En este sentido, el presidente de la Cámara de Alicante, Juan Riera, recordó la necesidad de adaptar la formación a las necesidades de las empresas, pero también animó a las compañías a aprovechar las ayudas de hasta 4.900 euros que ofrece el Gobierno para quienes den trabajo a los participantes en el Plan PICE.
