Sergio León será, junto a Nino, otro de los protagonistas del duelo que el sábado (14 horas) dirimirán el Levante y el Elche en el estadio Ciutat de València.

El delantero cordobés fue uno de los objetivos de la comisión deportiva franjiverde para reforzar la plantilla después del ascenso a Primera División. En el club ilicitano lo veían como el atacante con movilidad que demandaba Jorge Almirón. Pero su alta ficha, casi dos millones de euros, impidió su regreso al estadio Martínez Valero, donde fue «Pichichi» de Segunda División con el conjunto franjiverde en la temporada 2016-2017. Bragarnik no accedió a pagar esas cantidades y, finalmente, se decantó por fichar al argentino Lucas Boyé.

Sergio León no está teniendo mucha fortuna en el conjunto granota, al que llegó la campaña pasada, procedente del Betis, con un traspaso de tres millones de euros. Firmó por tres años y tiene contrato hasta 2022. En su primera temporada disputó un total de 22 partidos y anotó solo un gol. No cumplió con las expectativas y pasó de ser el «9» titular al banquillo, quedando por detrás de Roger y de Morales para el técnico levantinista, Paco López.

Esa situación provocó que el Levante le pusiera la etiqueta de transferible y su representante, Joaquín Vigueras, que tiene en el Elche otros jugadores como Josan o Josema y que también es el agente de otros exfranjiverdes como Iván Sánchez, Manuel Sánchez, Dani Escriche o Claudio Medina; pusiera todo el empeño para que pudiera volver al Martínez Valero, donde dejó un buen recuerdo en la temporada post descenso administrativo de Primera, en la que fue el jugador más destacado de aquella plantilla que dirigió Rubén Baraja. Eso le permitió ser traspasado en 2017 a Osasuna, por 1,7 millones, y al año siguiente recaló en el Betis a cambio de 3,5 millones que ingresó el club navarro.

Sergio León celebra un gol durante su etapa en el Elche CF / MATÍAS SEGARRA

Sergio León consiguió su sueño de hacerse un hueco en Primera División después de su salida del Elche, pero ha ido perdiendo protagonismo con el transcurso de los años.

Al delantero andaluz le agradaba la posibilidad de regresar al Elche, al que veía como una gran posibilidad de enderezar su carrera. De hecho, tuvo ofertas de la MLS de Estados Unidos, pero su prioridad era quedarse en el fútbol español. Incluso el Alavés también se interesó por sus servicios, pero su alta ficha impidió que recalase en tierras vitorianas.

El Levante ha firmado esta temporada a Dani Gómez, del Tenerife, y a Jorge de Frutos, del Castilla para reforzar el ataque, relegando a Sergio León a quinto delantero por detrás también de Roger Martí y Morales, que fueron los que terminaron como titulares la liga pasada.

A pesar de no contar para Paco López, Sergio León ha jugado tres partidos y acumula un total de 106 minutos, pero siempre saliendo desde el banquillo. En el último encuentro frente al Alavés salió en la segunda parte y falló una ocasión muy clara, que le podría haber dado una victoria muy importante al cuadro granota y de la que el entrenador levantinista llegó a decir que era una error impropio del fútbol profesional.

Pese su complicada situación, el exatacante franjiverde no se ha resignado y espera seguir disfrutando de oportunidades. Pero tras el último fallo frente al Alavés y la posible recuperación de Roger, que está pendiente de los resultados del segundo PCR anti-covid para acabar con su confinamiento, hacen que Sergio León tenga difícil poder jugar el próximo sábado frente al Elche.

Banquillo para los dos ex

El atacante cordobés, en el Levante, y Nino, en el Elche, son los dos únicos jugadores de ambas plantillas que han vestido las dos camisetas de los equipos que se enfrentarán en el Ciutat de València y, curiosamente, salvo sorpresa, ambos estarán inicialmente en el banquillo.

Si Sergio León no ha disfrutado de muchos minutos como levantinista, lo mismo le sucede a Nino con los ilicitanos. Ambos han visto cambiado su rol después de ser goleadores con la camiseta franjiverde. Pero la situación de uno y de otro es distinta. Nino cuenta ya con 40 años y sigue dando guerra, mientras que Sergio León tiene todavía 31 y está viendo cómo se le están apagando las últimas posibilidades de continuar jugando en Primera División.

A pesar de ello, ambos vivirán con ilusión y motivación el Levante-Elche del sábado.