Edgar Badía alcanzó en el encuentro de este domingo frente al Villarreal (1-0) sus cien partidos de competición oficial con el Elche CF. Además, el portero catalán lo hizo siendo protagonista y volviendo a dejar su portería a cero. El guardameta franjiverde ha vuelto a ser protagonista principal en el conjunto ilicitano después de un tiempo en el ostracismo cuando en la temporada pasada Fran Escribá lo relegara al banquillo y esta campaña empezará también como suplente por detrás de Kiko Casilla.
Badía, de 29 años, llegó en el mercado de invierno de la temporada 2018-19 tras el descenso y desaparición del Reus y desde su llegada fue titular en la portería del Elche. El guardameta barcelonés fue pieza clave en el ascenso a Primera División y también determinante durante buena parte del pasado curso en la máxima categoría.
El portero vivió su peor momento en el club en las últimas jornadas del pasado campeonato, cuando el anterior entrenador, Fran Escribá, lo relegó a la suplencia tras la derrota en Huesca (3-1) en beneficio del argentino Paolo Gazzaniga.
Edgar Badía arrancó la actual campaña como suplente de Kiko Casilla, fichado este pasado verano, pero recuperó la titularidad en noviembre, hace ya nueve jornadas, en la visita a Mallorca (2-2).
Edgar Badia termina contrato con el club ilicitano a final de la presente temporada, pero tiene una cláusula por la cual puede renovar de forma automática si el Elche logra continuar en Primera División y juega la mitad de los partidos como titular.
