El delantero argentino Guido Carrillo regresaba esta mañana a los entrenamientos con el equipo. Fue el último en llegar al campo de fútbol Díez Iborra y en la puerta se encontró con un gran recibimiento brindado por los jóvenes alumnos del centro público de educación especial Tamarit, que vivieron con mucha alegría la llegada de los jugadores, a los que animaron al grito de "¡Elche, Elche, Elche!".
Carrillo entrenó con el resto del grupo y al mismo nivel, sin presentar ningún síntoma de su última lesión. Lo hizo tras dos días sin entrenar junto a sus compañeros. Como ya adelantó este periódico, estará disponible para el choque del viernes ante el Rayo Vallecano. El atacante está listo para acompañar a Pere Milla en la línea de arriba. Son los dos únicos delanteros disponibles para Francisco, ya que Lucas Boyé está lesionado y el último fichaje en la delantera, Ezequiel Ponce, viene de una lesión larga y, aunque podrá ser convocado, difícilmente puede estar al nivel competitivo del resto.