Segunda RFEF

Hércules - Lleida | Preparados para vivir un día inolvidable

El Hércules llega a la última jornada en la mejor disposición para certificar el ascenso directo, sin lesionados tras recibir el alta Artiles y con Alvarito como única baja

A los blanquiazules podría valerles hasta perder con el Lleida para lograr un salto de categoría que no se ha podido conseguir desde 2010

Último entrenamiento del Hércules antes de su final por el ascenso a Primera RFEF contra el Lleida.

Último entrenamiento del Hércules antes de su final por el ascenso a Primera RFEF contra el Lleida. / Jose Navarro

Pedro Rojas

Pedro Rojas

Aparente tranquilidad. Nadie hace nada que no quepa en el guion. Entre ejercicio y ejercicio se escapan algunas risas, pero de fondo, nítido, solo se escucha al entrenador dando instrucciones. También los golpeos secos a la pelota, los encontronazos del cuero con el aluminio de los postes. Caras de concentración. Al deseo colectivo más irrefrenable de los últimos tiempos le faltan solo 90 minutos para consumarse. Solo eso. Tan cerca y tan lejos. El Hércules vive este domingo al mediodía otra cita con la historia, la que tiene que ser definitiva después de haber ido acumulando desengaños de forma indiscriminada.

Datos del partido.

Datos del partido. / INFORMACIÓN

Ha llegado el instante de sacudirse el malditismo, la superchería, los malos augurios, de enterrar los gafes y escribir otra página que, aunque no alcance la gloria de otras, sabrá muy parecido tras la odisea protagonizada por el club desde 2011, cuando fue expulsado de la élite e inició una caída libre que este 5 de mayo, por fin, puede revertirse con un aleteo dulce sobre la fuente de la Plaza de los Luceros.

Ganar asegura el objetivo. El resto de resultados ya tendrán que ver con lo que suceda en el Barrio de Gràcia de Barcelona, donde el Europa, uno de los socios fundadores de la Primera División española, recibe a su vecino del viejo Sarriá, el filial del Espanyol, que no se juega nada de nada, al menos en el plano deportivo o clasificatorio. Los barceloneses aún no han perdido ni un solo partido esta temporada como locales, así que no parece fácil que, en la coyuntura dominical, con lo que hay en liza, vaya a estallar la sorpresa.

Tanto el Hércules como el Europa –únicos que aspiran después de 33 jornadas a subir de categoría sin pasar por el «play-off»–, llegan el cierre de la fase regular en buena dinámica, con dos triunfos seguidos de mérito capital, pero solo uno lo hace dependiendo de sí mismo, el equipo de Torrecilla, que puede sellar un récord de seis triunfos consecutivos, algo de lo que solo se ha sido capaz una vez en la última década. Así de importante es lo que se está cociendo en la ciudad para sentir en propia carne una jornada inolvidable. Lo será pase lo que pase.

Para bien o para mal

Todo el mundo recordará dentro de muchos años qué estaba haciendo (y dónde) el Día de la Madre de 2024, el que debería acabar con la coronación de un proyecto que, a pesar de las dificultades enormes por las que ha transitado y sus evidentes carencias, ha sabido levantarse siempre que le han golpeado sin dejarse noquear, sin darse por vencido ni cuando las críticas arreciaban como lanzas con punta de diamante... seguramente merecidas.

Último entrenamiento del Hércules antes de su decisivo partido de ascenso

Jose Navarro

Solo Alvarito, por acumulación de amonestaciones, y José Artiles, por carecer de ritmo de competición tras recibir el alta médica, se pierden el choque contra el Lleida, que se presenta en Alicante con dos ausencias notables, la de su central colombiano Neyder Lozano, lesionado de gravedad hace un mes, y la del lateral zurdo João Vigário. El portugués fue expulsado por doble amarilla la semana pasada en el pulso con el Europa.

Torrecilla no prepara sorpresas. Cubrirá la ausencia del atacante madrileño con Nico Espinosa y, seguramente, prolongará una semana más la decisión técnica más controvertida que ha tomado como preparador blanquiazul: dejar en el banquillo al máximo goleador del equipo, Marcos Mendes, que tiene a tiro la posibilidad de ser pichichi del grupo 3. Solo dos tantos le separan del delantero del Terrassa Aythamy Perera, que suma 15.

Únicamente se piensa en la victoria, pero hay más margen, aunque este resulte más poético que prosaico porque las probabilidades de que el Europa se deje sorprender en su estadio son exiguas. Ganar y disfrutar. Ganar y que los más jóvenes vivan todo eso bueno que les han contado... y todavía no se creen.