Derribada hace más de una década, la Casa de las Palomas, edificio de estilo modernista que fue construido a principios del siglo XX en los terrenos que actualmente ocupa el Elche Parque Empresarial, volverá a ver la luz en breve tras haber superado una odisea burocrática. Eso sí, la réplica del inmueble no será levantada en el mismo lugar, aunque sí que se le ha buscado un emplazamiento acorde a su valor patrimonial en la zona de ampliación del área industrial de Torrellano. La empresa municipal Pimesa y la constructora Aitana ya han iniciado la obra de reconstrucción.
La nueva versión de la Casa de las Palomas estará situada en una zona destacada en uno de los bulevares del Parque Empresarial, junto a naves gigantes como la de Inditex. Esta edificación tradicional estaba incluida en el Catálogo de Edificios Protegibles del Plan General de Ordenación Urbana de 1998 y ha tenido que superar una auténtica carrera de obstáculos para levantar sus cimientos de nuevo desde que fuera derribada en 2006. El pasado agostó Pimesa logró adjudicar los trabajos de reconstrucción en una zona verde de la avenida del Calzado por un coste de 321.510 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses.
La casa de campo está siendo levantada a imagen y semejanza de su aspecto original, en el que contaba con dos zonas definidas por sus cubiertas. El cuerpo con la fachada original comprende un módulo rectangular con una torre en su esquina suroeste y cubierta inclinada. En la zona norte se encuentran los almacenes y dos patios, con cubierta plana.
Administración
El Ayuntamiento está estudiando actualmente qué uso definitivo le dará a la réplica de la Casa de las Palomas. El proyecto que está ejecutando Pimesa está enfocado a que el inmueble modernista acoja oficinas para uso administrativo. Por este motivo, se le ha dotado de un vestíbulo, una sala diáfana, un patio interior, dos aseos, un porche, una zona de archivo y un distribuidor. «Estamos a la espera de que el Ayuntamiento decida su uso definitivo, de lo contrario, esta casa no tiene sentido. Está en suelo público y no se puede explotar comercialmente», explica el gerente de Pimesa, Antonio Martínez.
La nueva versión que se está construyendo del inmueble modernista contará con 198 metros cuadrados, 158 en su planta baja y 40 en la planta piso, y se ubicará en una parcela de 4.500 metros cuadrados que está próxima a las instalaciones del Hospital IMED. «Cuando Pimesa compró la casa ya se encontraba en un deficiente estado de conservación. Pero es un bien protegido como elemento singular del Camp d’Elx», recalca el gerente de la empresa municipal antes de añadir que «al final, debido a su deterioro, se optó por su derribo y reconstrucción porque su grado de protección ambiental lo permite».
Otras construcciones que estaban situadas en los actuales terrenos del Parque Empresarial han sido derribadas, previo pago de indemnizaciones a sus propietarios, al ser incompatibles con el proyecto de expansión del área industrial, pero la singularidad y la protección de la Casa de las Palomas obliga a que sea replicada.
Licencia
La licencia de derribo ya llevaba aparejada la licencia de reconstrucción de la casa por parte de Pimesa, como agente urbanizador. El propio sector urbanístico es el que se encarga de sufragar la nueva obra, a la que se le ha buscado un emplazamiento preferente, presidiendo el primer bulevar que hay llegando al Parque Empresarial desde Elche. Una vez que finalice esta intervención, Pimesa le entregará la propiedad al Ayuntamiento mediante la firma de un convenio de concesión.
«La construcción en sí tenía poco valor y había envejecido mal por los materiales que se habían empleado, como su techo de uralita. Su auténtico valor radica en su estilo modernista y su importancia entre los elementos del Camp d’Elx», finaliza Martínez sobre el proyecto que permitirá levantar de nuevo la Casa de las Palomas tras su caída en 2006.
