El cuento Mi mamá no tiene pelo es una obra ilustrada para los más pequeños que nació como una herramienta para ayudar a los niños a asimilar la enfermedad de un ser querido. Su autora, la periodista y escritora Olga Avellán, presentó este lunes el ejemplar en el Hospital Universitario del Vinalopó de Elche. El cuento ilustrado, que ha recibido el patrocinio del Grupo Ribera, encargado de la gestión del centro sanitario ilicitano, pretende ofrecer mecanismos de ayuda para que los niños, principalmente en edades situadas entre los 3 y los 7 años, puedan comprender el proceso por el que tienen que atravesar familiares tan cercanas como madres, abuelas o tías cuando les diagnostican la enfermedad del cáncer de mama.
«Lo que busco con este proyecto, que ha nacido durante mi experiencia personal, es ofrecer una herramienta con la que cuenten las mujeres que la puedan necesitar en un momento determinado de sus vidas», explicó la propia Avellán en el acto de presentación que tuvo lugar este martes en la sala VIP del Vinalopó. Al tratarse de un cuento ilustrado, las imágenes pintadas con acuarela pertenecen a talleres de «colorterapia», en los que se busca conectar y centrar la atención del niño.
Regalo
La autora de Mi mamá no tiene pelo hizo entrega este martes de un primer ejemplar solidario a una de las paciente de la Unidad de Mama del centro hospitalario ilicitano, Cristina Martínez. Durante el acto, la escritora, que también es paciente de la enfermedad, y la receptora del regalo, estuvieron acompañadas por el gerente del Hospital, Rafael Carrasco, el alcalde de Aspe, Antonio Puerto (Avellán es originaria de la localidad del Medio Vinalopó), la presidenta de la Asociación de Mujeres Afectadas por Cáncer de Mama de Aspe (Macma), Paqui Calatayud, y el doctor Eugenio Palomares, oncólogo que forma parte de la Unidad de Mama.
La periodista vivió en sus carnes la experiencia sobre la que ahora quiere ayudar a otras mujeres en el pasado 2019, momento en el que le fue diagnosticada la enfermedad con un hijo de tres años y embarazada de dos meses. Avellán ha reconocido que aquella situación fue complicada y por eso se propuso, a través de un cuento, cómo contar a un niño que su madre tiene cáncer. Antes de que el libro saliera físicamente a la venta, se lanzó una campaña de venta previa en una plataforma digital, con gran acogida.
Parte de la recaudación del proyecto se destinará a la creación de becas de investigación dedicadas a la detección temprana del cáncer de mama, que se canalizarán a través de la Federación Española del Cáncer de Mama (Fecma). Esta fue, precisamente, una de las grandes reivindicaciones de asociaciones locales y el Ayuntamiento durante la lectura del manifiesto en la Plaça de Baix el pasado mes, un acto en el que se pidió que se recuperaran los recursos previos a la pandemia.
