Pillados in fraganti robando una bicicleta de 600 euros en Elche

La Policía Local les decomisó una cizalla, una bujía y varillas metálicas.

Una bicicleta desmantelada en un estacionamiento

Una bicicleta desmantelada en un estacionamiento / GC

Una llamada ciudadana evitó el pasado día 13 la sustracción de una bicicleta, valorada en 600 euros por el propietario, que la había dejado a buen recaudo, o eso al menos pensaba él, en la plaza de l'Algeps, en el barrio de Carrús de Elche. El vecino avisó a los agentes al ver a dos jóvenes de aspecto sospechoso acercarse al vehículo amados con una cizalla, una sierra para cortes metálicos.

El vehículo había sido dejado por el propietario en los pivotes de un aparcamiento, atado con una cadena y un candado que, de no ser por el ciudadano, sería lo único que se habría encontrado a su vuelta. Una patrulla de la Policía Local acudió al lugar descubriendo a dos jóvenes de 19 y 21 años a los que identificaron por los datos facilitados por el testigo y porque se encontraban en plena "faena".

Bicicletas recuperadas por la Guardia Civil

Bicicletas recuperadas por la Guardia Civil / GC

Cizalla

"Al percatarse de la presencia policial, los sospechosos se alejaron con una actitud esquiva, aunque fueron interceptados, identificados y registrados por motivos de seguridad", se añade en el atestado policial. Dentro de una mochila que llevaba uno de los implicados encontraron la cizalla, pero no solo eso, también una bujía, "utilizada habitualmente para fracturar cristales" y unas varillas metálicas.

Objetos estos dos últimos muy usados por los cacos para abrir vehículos, ya bien sea rompiendo alguna de las lunas o forzando las cerraduras, casi siempre con el objetivo de sustraer objetos de su interior.

En libertad

Mientras los agentes realizaban las gestiones apareció el dueño de la bicicleta, que manifestó que estaba valorada en unos 600 euros. Como se pueden imaginar, se alegró tanto de la llamada vecinal como de la rápida respuesta que dieron los agentes que, a continuación, trasladaron a los dos jóvenes, ya detenidos, a dependencias policiales.

La gravedad de los hechos supuso que quedaran posteriormente en libertad a expensas de las diligencias judiciales.