El pleno que se celebrará esta noche en el Ayuntamiento de Aspe promete seguir ahondando en la polémica sobre la gestión realizada por el equipo de gobierno popular en sus primeras Fiestas de Agosto. Junto con el "tirón de orejas" administrativo que dio el secretario municipal al edil responsable de Fiestas, Óscar Planelles y, por extensión, a la alcaldesa de la localidad, Nieves Martínez, por la adjudicación de los contratos de conciertos -y el consiguiente recurso de demanda contra el consistorio interpuesto por una empresa de espectáculos-, el equipo popular debe lidiar ahora con las consecuencias un duro informe firmado por la interventora municipal hace 11 días. La funcionaria declara en una nota de reparo que existe un conjunto de facturas de las fiestas por valor de 115.700 euros que "adolecen de insuficiencia de crédito presupuestario" y que, por tanto, supone un gasto prohibido por ley al no estar contemplado en ningún presupuesto. Estas facturas se corresponden a gastos como el pago de la Coral Crevillentina y a diversos actos festivos que no están incluidos en el presupuesto elaborado por la concejalía de Fiestas antes de los días grandes. De esta manera, y contando con las dos desviaciones de fondos con que se cerró el gasto oficial para las Fiestas de Agosto, el Ayuntamiento ha invertido alrededor de 730.000 euros en los festejos de este año.

El equipo popular aprobará en el pleno de hoy -tiene mayoría absoluta- una modificación de crédito con la que cubrir esas facturas con el remanente de tesorería, gastos que no estaban previstos y que, por tanto, la interventora denuncia. El informe recuerda a las autoridades locales que "su cuantía es superior al importe de los créditos autorizados" y que por esta razón están prohibidos por la Ley Reguladora de las Haciendas Locales. La interventora apunta además que pueden derivarse "responsabilidades" a las autoridades que hayan generado una "contratación irregular según la ley de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas".

Cuchillos afilados

Los portavoces de la oposición ya "afilan los cuchillos" en las horas previas a la celebración del pleno en el que el PP tendrá que responder por "las fiestas más caras de la historia de Aspe", según el portavoz socialista en el Ayuntamiento, Manuel Díez. "Cuando gobernaba el PSOE se gastó en el año 2006 un total de 395.110 euros en las fiestas patronales, mientras que la gestión del PP ha arrojado un gasto de más de 700.000 euros, sin que las celebraciones hayan destacado por nada en especial", apunta el PSOE en un comunicado.

Por su parte, el edil de EU en el Ayuntamiento de la localidad, Antonio Puerto, criticó que, tal y como refleja el informe, "se haya fraccionado un pago en dos o tres cantidades para evitar licitar un contrato". Se trata de las facturas presentadas por Pressone Digital Video por importe de 18.052 euros y las de un proveedor, de 20.875 euros. En este caso, la interventora presupone "que se haya realizado un posible fraccionamiento del contrato con la finalidad de evitar la licitación de un contrato mayor", ya que la ley obliga a convocar concurso para contratos superiores a 12.000 euros.

En respuesta a las preguntas de este diario, el edil de Fiestas reconoció que se trata de "un informe duro", pero sostuvo que "sólo denuncia defectos de forma" para que sean subsanados por las autoridades locales en lo sucesivo. En este sentido, Planelles adelantó que existe un informe avalado por el secretario municipal con fecha de 18 de octubre, y, por tanto posterior al de la interventora, que "justifica jurídicamente la posibilidad de abonar esas cantidades por el bien de los proveedores". Además, el edil apuntó que "el PSOE ya recibió otra nota de reparo en 2006 por la misma razón. Había 25.000 euros en facturas sin presupuestar de las fiestas, y en aquella ocasión los proveedores permanecieron más de un año sin cobrar", apuntó.