El joven eldense de 17 años que sufrió un accidente en la tarde del pasado jueves sigue debatiéndose entre la vida y la muerte, por cuarto día consecutivo, en el Hospital General Universitario de Alicante donde ayer permanecía ingresado en el servicio de Reanimación y con pronóstico reservado.
Como ya adelantó el sábado este diario, el joven perdió el control cuando circulaba con una motocicleta de 125 cc por la carretera CV-835 que une Elda y Monóvar, muy cerca del Centro Excursionista Eldense, y tuvo la mala fortuna de clavarse el manillar de la moto entre la rodilla y la ingle de su pierna izquierda, lo que le produjo una fuerte hemorragia.
La rápida y diligente actuación de los agentes de la Policía Local de Elda y de un enfermero y un médico fuera de servicio, que casualmente pasaban por el lugar del siniestro en el momento en que ocurrió, evitó que el menor perdiera la vida en el acto. Todos ellos colaboraron estrechamente para que el joven no se desangrara. Mientras esperaban la llegada de una ambulancia, el enfermero decidió quitarse el vendaje que llevaba puesto en su pierna y se lo aplicó al herido logrando, de este modo, taponar la hemorragia. Minutos después llegaba al lugar una ambulancia SVB a la que dos patrullas de la Policía Local le abrieron paso hasta el Hospital General Universitario de Elda. Y desde allí, una vez estabilizado, fue trasladado al Hospital de Alicante donde sigue luchando por su vida.
