Nelson Haedo Valdez respiró ayer aliviado al examinar junto al doctor Jeroni Llorca los resultados de la resonancia magnética a la que fue sometido en el Perpetuo Socorro. Las pruebas confirmaron que el delantero paraguayo sólo sufre una contusión en la zona de los abductores de su pierna izquierda, por lo que podría llegar a tiempo al Hércules-Sevilla del próximo domingo.

"Ha sido el mejor resultado posible porque no hay ninguna rotura", destacó ayer el doctor Llorca, quien se mostró cauto al referirse al trabajo a contrarreloj que realizarán junto a Valdez para que juegue ante el Sevilla. "Es pronto para decir si estará recuperado o lo contrario. Vamos a trabajar duro con él y ojalá el viernes pueda realizar una prueba junto a sus compañeros", añadió Llorca.

Valdez se lesionó durante la segunda parte del choque ante el Valencia y ya sobre el campo los pronósticos eran pesimistas, ya que el paraguayo intentó sin éxito regresar al partido tras ser atendido en la banda. El fantasma de la contractura o rotura muscular sobrevoló por el vestuario, aunque el propio Valdez destacó, tras pasar por la ducha, que había sufrido sólo un fuerte golpe. Confiaba en que no hubiera rotura y Llorca lo confirmó ayer.

El ex jugador del Borussia Dortmund se mostró ayer "muy confiado" en su recuperación para el domingo y no ocultó su tristeza por no estar disponible para jugar esta noche en Zaragoza.

Tote ocupará en La Romareda el hueco dejado por el paraguayo, quien acaparó el interés mediático nacional e internacional tras sus dos goles en el Nou Camp.

Por otra parte, el doctor Llorca restó importancia a la sobrecarga muscular sufrida ayer por Abel Aguilar y que le obligó a abandonar el entrenamiento antes que sus compañeros. "Le realizaremos una prueba antes del partido para ver cómo ha evolucionado. Abel se ha retirado porque no se sentía cómodo pero confiaba en estar recuperado para jugar", resaltó el médico del Hércules