Quique Hernández, entrenador del Hércules, ha calificado el emparejamiento entre su equipo y el Murcia en la segunda eliminatoria de Copa del Rey como un cruce "interesante y de rivalidad".

El sorteo celebrado hoy en la sede de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha deparado un enfrentamiento entre alicantinos y murcianos, que se disputará en el estadio Rico Pérez, inicialmente el día 11 de septiembre.

Hernández ha valorado positivamente el cruce con el Murcia porque "permite al equipo jugar ante su afición", según facilitó el departamento de comunicación del Hércules a través de una nota oficial.

El técnico valenciano calificó como "muy difícil" la eliminatoria y resaltó la importancia que tiene para el club hacer un buen torneo.

"Le damos mucha importancia a la Copa del Rey y queremos llegar lo más lejos posible. El Murcia es un rival muy complicado, pero ante nuestra afición intentaremos pasar para seguir compitiendo todas las rondas que podamos", defendió.

Por su parte, el delantero del Hércules Javier García Portillo comentó antes de saber el resultado del sorteo que el equipo "no debe tirar la Copa" e intentará llegar "lo más lejos posible".

Hércules y Murcia se enfrentarán en una eliminatoria de Copa del Rey por quinta vez en la historia -bajo sus diferentes denominaciones-, aunque será la primera en la que lo hagan a un solo partido ya que las anteriores se disputaron a doble confrontación, con un envite en el campo de cada uno de los equipos.

En 1935, ambos conjuntos, que militaban en categoría regional, se midieron en las rondas previas y el conjunto alicantino salió victorioso. En el ejercicio 41-42, en el que el Hércules compitió bajo el nombre de Alicante, fue el cuadro murciano el que se impuso, como sucedería dos temporadas más tarde, en la 43-44.

El Murcia volvió a cruzarse en el camino del Hércules y a apearlo de la competición en la temporada 52-53, como también en la 91-92, la última vez en que quedaron emparejados en Copa.

En aquel último emparejamiento copero los alicantinos militaban en Segunda B y los murcianos en Segunda División.