¿Cómo se recupera un equipo para competir al máximo nivel después de una cuarentena por el coronavirus?
Tanto tiempo en casa te hace plantearte todas las situaciones que puede haber durante el año, hacer borrón y cuenta nueva y empezar con muchas ganas después de tanto tiempo parado. Lo fundamental es el trabajo diario que se está realizando.
¿Llegan al estreno liguero del domingo en las mejores condiciones posibles después de este parón de casi 10 días?
Sí; antes del parón llevábamos muy buen trabajo y estos días en los que hemos podido retomar el ritmo nos han venido muy bien. El equipo estará en plenas facultades físicas y mentales para el estreno en el Rico Pérez.
Se ha debido de hacer interminable la espera de siete meses y medio para volver a competir, más la semana extra de su confinamiento...
Sí; ha sido la pretemporada más larga que hemos vivido todos. Hemos estado mucho tiempo esperando para iniciar la Liga y el equipo tiene una ilusión tremenda, como se ve en los entrenamientos, y confiamos en arrancar con un buen partido.
No hay excusas esta temporada para que el Hércules recupere su identidad y deje atrás la pesadilla de la pasada campaña que casi acaba con el descenso a Tercera...
Es un año muy importante por todos los cambios que se viven en el mundo del fútbol y el Hércules siempre opta a lo máximo. Esperemos que yendo partido a partido, sin más cálculos ni vistas al futuro, consigamos el objetivo de volver al fútbol profesional. Debemos fijarnos en el presente y en el partido del Atzeneta, que es lo que toca. Debemos centrarnos en cada fin de semana porque en cualquier momento se puede aplazar o puede haber un desajuste que no nos debe afectar.
El nuevo formato de la competición no permite ningún despiste. La exigencia es máxima e inmediata...
Sí; este formato tan reducido y repartido en varias fases te permite muy poco margen de error. Se dice que el equipo que antes se adapte a este nuevo formato y a los posibles cambios por aplazamientos y demás será el que esté arriba. Confío mucho en el equipo. Somos un grupo compacto, tenemos las ideas claras y esperamos transmitirlo cada domingo en el campo.
El Hércules no puede permitirse quedar fuera de la nueva 2ª B Pro si no es capaz de volver al fútbol profesional al final de esta temporada...
El fútbol demuestra cada año al final que no haya favoritos. Tenemos que tener los pies en el suelo, ser muy humildes y conscientes de que si no vamos partido a partido y con las ideas muy claras cada fin de semana y el trabajo bien hecho podemos pasarlo mal porque todos los equipos tienen grandes jugadores. Al final dependerá del trabajo diario, de la confianza en nosotros mismos y, sobre todo, de lo que plasmemos en el campo. Estoy seguro de que este año daremos muchas alegrías.
Será su tercer curso seguido en el club de su vida. ¿Qué Nani veremos esta temporada?
Espero que pueda mejorar el rendimiento que di la temporada pasada. Sigo con la misma idea de aportar muchísimo trabajo e ilusión. Soy un jugador que intenta transmitir, esas ganas, ímpetu e ilusión que siempre tengo y quiero trasladar al campo. Espero ayudar así a mis compañeros.
¿Qué ha cambiado esta temporada con relación a las dos anteriores que usted haya notado en estos dos últimos meses de trabajo?
Ya lo he dicho en alguna ocasión. Este parón nos ha venido bien a la gente que veníamos del año pasado para limpiar la cabeza y volver con muchas ganas. Eso se ha unido a una profesionalización del club para mejor. Además, la gente que ha venido nueva lo ha hecho con muchas ganas, aportando experiencia en muchos casos y también los más jóvenes llegan con ilusión y entrega, calidad y buenas cualidades que están poniendo al servicio del equipo. Ya se han visto muchos detalles en los partidos de pretemporada.
También se percibe más competencia en todas las demarcaciones del equipo...
Sí, estamos trabajando muy bien en los entrenamientos, en los que se ve mucha competencia. Nadie se puede relajar; tenemos dos jugadores por puesto y en alguna posición incluso más. La competencia es brutal y los entrenamientos son de un nivel espectacular, con una exigencia increíble, que al final hará que el equipo vaya bien, seguramente, que compitamos y que consigamos los resultados deseados.
¿Su condición de canterano le hace sufrir y disfrutar más con las penas y las alegrías del Hércules?
Es verdad que ser de casa y haber estado varios años en la cantera y ser aficionado desde pequeño del Hércules me hace vivir todo mucho más, pero eso puede ser un arma de doble filo. Tampoco tengo que pasarme con esos sentimientos porque al final tengo que ser profesional y no dejarme llevar por las emociones. Sí es cierto que al final se vive un poco más. El Hércules es el equipo de mi ciudad.
¿Qué opina sobre la polémica de los altos precios de las entradas para el partido del domingo y de las protestas de los abonados y la afición?
Eso es cosa del club y no me puedo meter. Los tiempos han cambiado, entiendo las dos posturas y espero que se llegue a un entendimiento entre las partes lo antes posible.
¿Cuál es su sueño con el equipo de su ciudad?
Que este año salga bien, que el equipo funcione, consiga sus objetivos y veamos al Hércules el año que viene en el fútbol profesional. Pero todo eso tiene que pasar por el trabajo diario.
