Las peñas, el alma viva blanquiazul

Los herculanos han acompañado al equipo en todo este largo camino sin perder la ilusión y la ambición por conseguir el objetivo

Un Rico Pérez lleno absoluto ha sido una muestra de que la afición está presente y sigue ahí, apoyando a su equipo.

Un Rico Pérez lleno absoluto ha sido una muestra de que la afición está presente y sigue ahí, apoyando a su equipo. / Alex Domínguez

Son el alma y el corazón de cada encuentro del Hércules. Las peñas son el himno vivo del club blanquiazul en cada uno de sus encuentros. Son ellas las que representan la pasión y la fidelidad al equipo de sus vidas. Las verdaderas sufridoras, quienes han acompañado a los «machos» en todo este largo camino, entre risas, gritos y alguna que otra lágrima, sin perder la ilusión y la ambición por lograr la hazaña.

Las peñas han guiado al club dentro y fuera de la terreta, luchando contra viento y marea, y soñando con regresar a Primera Federación. 

Luis Hernández de «Herculanos sin Fronteras», la peña veterana y señora de tribuna alta, es el claro ejemplo de la dedicación: «En estos tres años complicados hemos sido constantes acompañando al club, acudiendo cinco o seis miembros por encuentro fuera de casa, como en esta última temporada que hemos vivido intensamente, viajando, en mi caso, hasta 12 de los 17 encuentros fuera de casa», explica Hernández con emoción.

«Herculanos Sin Fronteras» sigue con ilusión cada partido.

«Herculanos Sin Fronteras» sigue con ilusión cada partido. / INFORMACIÓN

El camino de la afición no siempre es fácil, pero para la peña constituida en el 2000, ningún bache es capaz de frenar la ilusión de todos sus miembros, tal y como relata Hernández: «Se nos rompió el autobús para ir a Lleida, pero eso no evitó que esperamos dos autobuses, todo por el club». Finalmente, nada ha sido en vano «para vivir lo que se sintió en el Rico Pérez, algo que nunca he vivido», afirma el miembro de «Herculanos Sin Fronteras».

De la misma forma, Lola Belló, de «Guerreras Herculanas», símbolo de la marea femenina blanquiazul, ha estado en los altos y bajos del club, guerreando y demostrando el amor incondicional de las hinchas. «Este año sí, este año vamos a Luceros», estas eran las palabras premonitorias de la presidenta de la peña al comienzo de la temporada que vaticinaban lo vivido el pasado 5 de mayo: «Volver a ver el estadio lleno como antaño, bufandas y banderas al viento, el mosaico de preferente y la afición cantando el himno casi a capela», señala Lola.

«Guerreras Herculanas», símbolo de la marea femenina blanquiazul.

«Guerreras Herculanas», símbolo de la marea femenina blanquiazul. / INFORMACIÓN

Sin perder de vista el futuro, Lola recalca que «no hay que vivir del recuerdo, sino trabajar para volver a estar en lo más alto. Alicante, su afición, el equipo, todos juntos y en armonía, podemos conseguirlo».  

El relevo generacional ha sido una de las piezas imprescindibles en el ascenso, viendo como esta afición es transmitida por los veteranos a los más noveles, continuando un proyecto compartido. Víctor Toral, presidente de la peña «Renacer Blanquiazul», representa esta implicación: «El ascenso para nuestra generación, curtida en los peores momentos, ha sido la primera vez que vivíamos un éxito herculano y que recordaremos siempre».

Siendo este su primer año completo como peña oficial, este grupo de jóvenes de entre 20 y 25 años defienden «la cultura de ser hincha activo, acudiendo a viajes o previas» y destacando la importancia de «sentirse partícipes de un sentimiento común» por encima del «ganar o perder». Quién les iba a decir a esos niños que en 2010 veían al Hércules batirse con los más grandes, que estarían hoy al pie del cañón compartiendo, tal y como expresa Toral, «una alegría tan grande como fue la victoria contra el Badalona Futur en la penúltima jornada».

La peña «Renacer Blanquiazul» apoyando a su equipo.

La peña «Renacer Blanquiazul» apoyando a su equipo. / INFORMACIÓN

Nadie duda que de lo que nunca ha carecido el club es del gran apoyo popular y Paco Esteve, miembro de la peña «Negre Lloma», refleja la entrega absoluta durante 18 años: «nosotros no cambiamos, pase lo que pase con los jugadores o el cuerpo técnico, siempre recibirán nuestro apoyo, ya que defienden nuestro escudo».

La peña «Negre Lloma» refleja la entrega absoluta.

La peña «Negre Lloma» refleja la entrega absoluta. / INFORMACIÓN

Como gran parte del resto del las peñas, comparten un mismo sentir, tanto en la devoción como en los puntos necesarios a reformar de cara a Primera RFEF: «El equipo tiene muchas necesidades, no sólo ascender, necesita una estructura definida o una reforma del estadio, entre otras cosas», señala Esteve. El cambio organizativo es uno de los factores fundamentales para seguir creciendo y continuar soñando por un Hércules compitiendo con los más grandes. 

PEÑAS:

  • El Altet
  • Negre Lloma 
  • Guerreras Herculanas 
  • El Chepa 1922
  • Herculanos sin fronteras 
  • Renacer blanquiazul 
  • Frente Herculano
  • Patiment Herculana
  • Sueño blanquiazul
  • Hijos de Zeus y el Penalty
  • Asociación de Herculanos 
  • Veteranos del Hércules 
  • Unidad herculana