Los ataques selectivos de Rusia contra infraestructuras civiles en Ucrania, como la red eléctrica, son "crímenes de guerra". Así los considera la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que ha arremetido con dureza contra los últimos bombardeos ordenados por Vladímir Putin. "Los ataques selectivos contra la infraestructura civil con el claro objetivo de dejar sin agua, electricidad y calefacción a hombres, mujeres y niños con la llegada del invierno son actos de puro terror y tenemos que llamarlos así", ha denunciado durante su intervención ante el pleno del Parlamento Europeo, en vísperas del Consejo Europeo que se celebra este 20 y 21 en Bruselas con el foco puesto en la guerra en Ucrania y la energía.
La alemana también ha insistido en que este es el momento de mantener el rumbo y el compromiso con Kiev. "Apoyaremos a Ucrania durante el tiempo que sea necesario y protegeremos a los europeos de la otra guerra que está librando Putin contra nuestra energía. Sé que los europeos están preocupados por la inflación, por sus facturas de energía, por el invierno. La mejor respuesta al chantaje del gas de Putin es la unidad y la solidaridad europea", ha recordado sobre la necesidad de mantener la unidad tanto sobre Ucrania como sobre un tema tan divisivo como son las medidas para frenar la escalada de los precios de la energía.
"Hay que hacer más para solucionar las subidas de precios y la manipulación del mercado ruso", ha recordado satisfecha, no obstante, con el hecho de que en ocho meses han conseguido reemplazar dos tercios del gas procedente de Rusia, con un recorte este septiembre del 80% de los envíos por gasoducto. "No hemos cedido en este chantaje. Hemos resistido pero resistir a la coerción de Rusia tiene un precio. Las familias europeas han visto dispararse sus facturas y nuestras empresas luchar para mantener su competitividad", ha admitido pasando a esbozar el nuevo plan diseñado por sus servicios para intervenir el precio del gas.
En el mismo no figura la posibilidad de desvincular el precio del gas del de la electricidad, tal y como sugirió ella misma hace semanas, porque sigue imponiéndose el temor a que dispare el consumo en la UE o que el club termine subsidiando la electricidad de terceros países. Pero Von der Leyen ha reconocido de nuevo que el modelo del 'mecanismo ibérico', que ha permitido rebajar el precio de la electricidad en España y Portugal "merece ser estudiado a nivel de la UE" y asegura que no dejará "ninguna piedra sin remover".
Cumbre de líderes, próxima parada
El plan, que examinarán los líderes en la cumbre de finales de semana, gira entorno a tres medidas: compras conjuntas de gas -obligatoriamente el 15% de los volúmenes necesarios para llenar los depósitos- para que las empresas de los Estados miembros aprovechen su poder de negociación conjunto y eviten que unos países pujen contra otras porque "compartir gas es absolutamente crítico"; solidaridad para garantizar que todos los países tienen acceso al combustible fósil en tiempos de crisis; y medidas para corregir de forma temporal los disparados precios del gas. La alemana ha dicho que en marzo pasado la idea de topar el precio no obtuvo apoyo entre los Veintisiete. La medida, de hecho, sigue sin ser vista con buenos ojos en algunas capitales como Berlín.
Ante esta situación, Bruselas ha optado por plantear un mecanismo de corrección de precios temporal mientras diseñan un nuevo índice de referencia, alternativo al TTF holandés al que se indexan los contratos de gas en Europa actualmente. "Llevará algún tiempo así que como medida provisional, limitaremos los precios a través de la TTF. Lo llamamos mecanismo de corrección del mercado y ayer propusimos unos principios rectores como primer paso. Sobre esta base, prepararemos el mecanismo operativo en un segundo paso", ha explicado Von der Leyen, que ha anunciado la intención del Ejecutivo comunitario de presentar una propuesta para aumentar la "potencia" del programa RepowerEU.
"Sólo los Estados miembros con suficiente espacio fiscal pueden acometer inversiones críticas. Esto inevitablemente desnivelará las condiciones de nuestro mercado único. Por lo tanto, no solo necesitamos RepowerEU ahora, sino que tenemos que acelerarlo y aumentar su potencia de fuego. Presentaremos una propuesta que dará a todos los Estados miembros la misma oportunidad de prepararse para el futuro", ha anunciado. El siguiente paso ahora será la discusión del plan a nivel de jefes de Estado y de Gobierno. Según el ministro checo de Asuntos Europeos, Mikulas Bek, existe un "amplio consenso" sobre las áreas en las que hay que actuar para controlarlos precios todavía hay "divergencias".
