Consejo Europeo

Los líderes de la UE vuelven a fracasar en su intento de acordar una petición de alto el fuego en Gaza

“El Consejo Europeo ha celebrado un debate estratégico en profundidad sobre Oriente Medio”, se han limitado a recoger en el documento aprobado por los Veintisiete

Sánchez asiste a la última jornada del Consejo Europeo.

Sánchez asiste a la última jornada del Consejo Europeo.

Silvia Martinez

El voto en la Asamblea de Naciones Unidas este pasado 13 de diciembre, hace tan solo dos días, de una resolución pidiendo a Israel un alto el fuego en la Franja de Gaza mostró la profunda división que sigue existiendo entre los Veintisiete estados en torno a un conflicto de Oriente Próximo. Entonces, 17 de los 27 países de la UE apoyaron la petición, 8 se abstuvieron y dos votaron en contra. Una división que ha quedado de nuevo patente en el Consejo Europeo celebrado este jueves y viernes en Bruselas, incapaz de plasmar en las conclusiones de la cumbre la petición de alto el fuego propuesta por los líderes de España, Bélgica, Irlanda y Malta.

“El Consejo Europeo ha celebrado un debate estratégico en profundidad sobre Oriente Medio”, se han limitado a recoger en el documento aprobado por los Veintisiete tras un debate animado en el que ha quedado patente la negativa de algunas capitales a ir más allá de lo que fueron en la última cumbre, cuando consiguieron recoger la petición de “pausas humanitarias”. “Otros tienen ideas que van más allá pero sobre las que no hay acuerdo total”, ha reconocido el canciller alemán, Olaf Scholz.

El encontronazo entre algunas delegaciones, según fuentes diplomáticas, ha llevado a Michel a dar por cerrado el debate sin ningún tipo de declaración común. ¿Es partidario de pedir un alto el fuego?, le preguntaron este jueves al liberal holandés Mark Rutte. “No”, respondió escueta y rotundamente el primer ministro de Holanda, cuyo país fue el octavo en abstenerse esta semana junto a Bulgaria, Alemania, Hungría, Italia, Lituania, Rumanía y Eslovaquia. Otros dos, Austria y República checa, votaron en contra.

Esta divergencia de opiniones ha llevado a los líderes europeos a evitar la búsqueda de un nuevo lenguaje común, pese a la máxima presión de países como España, Bélgica, Irlanda y Malta que este pasado fin de semana enviaron una carta al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, pidiendo un debate serio y un alto el fuego humanitario.

Ayuda humanitaria

“Es exacto que hay entre los miembros del Consejo Europeo diferentes posiciones sobre las pausas humanitarias que defienden algunos y el alto el fuego humanitario que defienden otros pero esto no debe ocultar lo esencial”, ha recordado el liberal belga. Tampoco Pedro Sánchez, pese a su carta de hace una semana, ha querido ir más lejos -"sabe cuál es la posición de España", ha dicho el presidente del gobierno- aunque lo que sí ha pedido es una "reflexión estratégica" sobre la vecindad sur. "Lo que está sucediendo en Oriente medio debe obligarnos a mirar hacia la vecindad del sur", ha indicado. Lo esencial para Michel, en todo caso, es que los líderes de la UE están de acuerdo en apoyar la ayuda humanitaria a Gaza y en intensificar iniciativas ya sean corredores marítimos o cualquier otra vía. Por ejemplo, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha confirmado que desde el pasado 7 de octubre, en que tuvo lugar el ataque de Hamas, han organizado 28 vuelos, y enviado 1.200 toneladas de ayuda humanitaria, y que habrá otros cinco antes de que termine el año año.

“Se puede perseguir a los terroristas sin involucrarse en el tipo de guerra y destrucción que Israel está llevando a cabo en este momento en Gaza. Sabemos que los países europeos también han tenido que lidiar con el terrorismo, y no hicieron, ni siquiera contemplaron, hacer lo que Israel ha hecho en Gaza así que no estoy seguir de que podamos llegar a un acuerdo sobre el uso de la palabra alto el fuego” admitía a su llegada a la reunión el primer ministro de Irlanda, Leo Varadkar, que sí valora positivamente que la posición europea haya evolucionado desde octubre.

“En comparación con el último Consejo, la situación ha empeorado de manera dramática. Lo que debería ser nuestro objetivo es que el sufrimiento humano termine en ambas partes. Y ha habido demasiado sufrimiento humano. Los componentes de eso son que se debe lograr un pleno acceso humanitario, que los rehenes deben ser liberados y que debe haber un cese de las hostilidades”, avisaba este viernes el primer ministro de Bélgica, Alexander De Croo.