La oposición serbia denuncia irregularidades en las municipales de Belgrado y exige repetir las elecciones

La coalición opositora progresista Serbia contra la Violencia (SPN) ha dicho este lunes que no reconoce los resultados de las elecciones municipales en Belgrado celebrados este domingo y ha convocado una protesta esta tarde en esta ciudad. La decisión llega después de que el presidente del país, el nacionalista Aleksandar Vucic, anunciara que su formación, el Partido Progresista (SNS), ha ganado tanto los comicios parlamentarios como los municipales, según datos preliminares ofrecidos por su partido y luego confirmados por centros independientes. 

Sin embargo, de acuerdo con SPN, más de 40.000 personas que no residen en la ciudad habrían sido traídas en autobuses a la capital serbia por el SNS para votar a su favor. Según la ley serbia, no es posible votar en un sitio distinto al del lugar de la residencia. 

Por eso también la oposición ha pedido que los comicios municipales se declaren nulos y se repitan cuanto antes. Además, los opositores también han convocado para hoy a las seis de la tarde una protesta delante del ayuntamiento de Belgrado. De ahí la oposición tiene prevista una marcha hasta la sede de la Comisión Electoral.

Serbia celebró este domingo elecciones para el Parlamento nacional, la Asamblea de la región autónoma de Vojvodina y municipales en 65 ciudades, entre ellas la capital, con 1,6 millones de votantes de los 6,5 millones en total que hay en todo el país.

Irregularidades en todo el país

La alcaldía de Belgrado era uno de los grandes anhelos de las fuerzas opositoras por haber sido escenario de las multitudinarias manifestaciones callejeras que estallaron en la primavera pasada después de dos tiroteos masivos en Belgrado y en un pueblo cercano. Esto sacó a luz una crisis política sin precedentes en Serbia. Según las proyecciones de voto, el SNS habría conseguido 48 de los 110 concejales del municipio, frente a los 43 del SPN.

Según el prestigioso observatorio CRTA, la campaña electoral estuvo marcada por "presiones a votantes" y episodios de "violencia física y verbal". En el día electoral, observadores de CRTA sufrieron una agresión en Odzaci (norte) mientras documentaban un caso de corrupción. También se documentaron "grupos de personas traídas a votar" y que, al salir de los colegios, recibían "sobres". Otro instituto, el centro Cesid, también señaló decenas de otras irregularidades ocurridas en todo el país.