1 ¿Es posible que alguien lo haya abandonado? Varios expertos han dicho que no. Argumentan que nadie abandonaría a un animal con tal alto valor en el mercado. Se equivocan. Sabrán mucho de animales, pero poco o nada sobre el tráfico ilegal de especies y la tenencia de animales exóticos. Por supuesto que es posible. La duda ofende. ¿Por qué y para qué, si no, me he jugado las manos recogiendo cocodrilos que caminaban sueltos por el centro de València, por Murcia o, incluso, caimanes por Alicante?
Pero ¿quieren más casos? Hace unos años en Málaga se rescató a un cocodrilo del Nilo de más de dos metros de largo. Se había «afincado» en las lagunas de Mijas. Fue avistado por primera vez por un motorista y se tardó dos meses en capturarlo.
Por otro lado. ¿Existen actualmente personas que tienen cocodrilos en sus casas? Sí, existen. En este mismo diario han salido varios casos en los que el Seprona los ha intervenido y los ha puesto a disposición de las autoridades. Y, por cierto, ahí siguen, a su disposición. Tras varios años, continúan en las mismas casas particulares en las que el Seprona los encontró. Porca miseria.
2 ¿Es probable que sea un cocodrilo? Las imágenes que han circulado anunciando la presencia de nidos de cocodrilo o presentando restos de pez como una evidencia del mismo rallan lo esperpéntico. Es cierto que cuidar a cocodrilos decomisados me ha permitido conocerlos bien, pero creo que cualquier persona que haya visto las imágenes ha intuido que eran rastros de nutria. Era más que evidente.
En principio, en contra de que se trate de un cocodrilo está, principalmente, la baja temperatura del agua. Pero, a favor, el gran poder de adaptación de estos animales. Luego no es probable, pero sí es posible. No lo descarten en absoluto.
3 ¿Se está haciendo el ridículo en este caso? Evidentemente. Para empezar, lo que al principio era un cocodrilo ahora es una nutria gigante de dos metros. En tan sólo unos días hemos pasado de la curiosidad a la chirigota. Otra cosa es que noticias como esta sirvan y mucho. ¿Para qué? Pues para lo de siempre, para distraernos y darnos un poquito de pan y algo de circo.