Zapatero está filtrando, a través de medios y periodistas de su confianza, su deseo de consensuar algunos temas con el líder de la oposición, Mariano Rajoy. Necesita los votos afirmativos del PP para la reforma constitucional y el aval moral del principal partido de oposición para proseguir una negociación con ETA que se estanca y emprender alguna iniciativa que resuelva el problema de la inmigración ilegal. Pero Rajoy, por el momento, dice que de eso, nada, que no debatirá con Zapatero «temas que no interesan a nadie».

El comité de urgencia de seguimiento del vertido en el río Umia decidió ayer retomar el suministro de agua a la comarca del Salnés tras comprobar que las analíticas realizadas indican que el agua en los puntos de captación no está contaminada, informaron fuentes de Medio Ambiente.

La Consellería de Pesca, de acuerdo con el sector, también decidió asimismo reabrir los bancos de marisqueo cerrados el viernes como medida «cautelar», y que representan «menos del 0,20 por ciento del total de la ría», en previsión de que la mancha no llegue al mar. El comité de urgencia está compuesto por los conselleiros de Medio Ambiente, Manuel Vázquez y de Pesca, Carmen Gallego y de Sanidad, María José Rubio, el presidente de la Diputación Provincial, Rafael Louzán, y los alcaldes de la comarca del Salnés afectados por el vertido.

Sin embargo, el comité determinó que continúen los trabajos de construcción de tres diques para bloquear la mancha que contiene «seis componentes químicos» derivados del petróleo, así como la instalación de una tubería paralela al río para puentear el vertido. El vertido al río Umia se produjo el pasado viernes tras el incendio ocurrido en una nave de productos químicos de la firma Brenntag, en Caldas de Reis (Pontevedra).