Los barceloneses y madrileños que ansiaban a partir del lunes poder ver a sus amigos o familiares y disfrutar del sol en una terraza van a tener que esperar, al menos, una semana más. El Gobierno ha decidido que la Comunidad de Madrid y Barcelona y su área metropolitana (dividida en tres zonas sanitarias) sigan en la fase 0 pero con menos trabas para el comercio. Se trata de una etapa en la desescalada bautizada por la consellera Alba Vergés como fase avanzada ó 0.5, en la que se permite la apertura del pequeño comercio sin cita previa, los velatorios con un máximo de diez personas o la apertura de bibliotecas o museos con limitaciones de aforo. Si bien, las actividades con más riesgo de contagio de la fase 1 y a la que el pasado 11 de mayo escaló media España siguen restringidas. Así, no podrán abrir las terrazas de los bares ni se permitirán las reuniones de hasta diez personas.
Según informa EFE, el Ministerio de Sanidad ha incorporado unas mejoras o medidas de alivio para las zonas que permanecen en fase 0 de la desescalada, como que los comercios minoristas atiendan sin cita previa, aunque con medidas especiales para los mayores de 65 años, o velatorios con hasta diez personas. Con todo aún permanecen en la denominada fase 0 de desescalada el 30 por ciento de la población, unos 14 millones de ciudadanos. Como se ha dicho, se quedan en fase 0 la Comunidad de Madrid, Barcelona y amplias zonas de Castilla y León.
Novedades en la fase 0
La novedad es que en la fase 0 hay «mejoras» como las ya citadas y asistir a lugares de culto a un tercio de su capacidad, siempre manteniendo medidas de distanciamiento e higiene. Por ende, estarán permitidas alguna actividades culturales, como el préstamo de libros en bibliotecas y la visita a museos al 30 % de su capacidad, y la vuelta al trabajo en centros científicos que tuvieron parar su actividad el 14 de marzo.
Casi toda Cataluña
Pese a todo, toda Cataluña pasará el próximo lunes a la primera etapa de desconfinamiento, salvo el área metropolitana, que tiene el 9% del territorio catalán pero el 66% de la población, y el Baix Montseny. Precisamente la densidad urbana, las desigualdades económicas y la dificultad de detectar todos los nuevos infectados y sus contactos fue la que llevó a la Generalitat a mantener la «prudencia» y pedir, por miedo a un rebrote, que los habitantes de la capital y las ciudades cercanas sigan sufriendo un confinamiento más duro. Cataluña es, de hecho, la autonomía que más fallecidos y contagios ha reportado en los últimos días. Tiene una incidencia acumulada en los últimos 14 días de 44,85 casos por 100.000 habitantes.
Enfado mayúsculo en Madrid
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, criticó al Gobierno central por «no dejar a Madrid pasar de fase» porque la región «ha cumplido» y «está preparada», mientras «se arruinan los comercios y cada semana se pierde entorno a 18.000 empleos». Así lo comentó a través de Twitter la presidenta regional después de conocerse que el Ministerio de Sanidad ha rechazado por segunda vez que la Comunidad de Madrid pase a la fase 1 de la desescalada, tras una «discusión importante», en palabras del ministro Illa.
«El Gobierno no deja a Madrid pasar de fase y seguirá paralizada. No hay explicación técnica», aseveró Ayuso, quien ha añadido que la Comunidad de Madrid no es la región que «más porcentaje de contagio tiene».
Manifestaciones en Cataluña
Por último, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, afirmó no conocer el plan de la Generalitat para pedir al Ejecutivo que autorice manifestaciones en pleno estado de alarma. «Lo analizaremos y luego nos manifestaremos sobre ello. Por prudencia no me quiero manifestar sobre algo que no conozco», afirmó.
