Ante una campaña complicada, marcada por la escasez de lluvias y las altas temperaturas, con una floración desigual, Hilario Calabuig, presidente de la IGP Cereza de la Montaña de Alicante, habla de la actualidad de una fruta única.

La sequía ha marcado el inicio de la floración en esta campaña de la Cereza de la Montaña de Alicante, con una menor profusión de lo habitual. ¿Las lluvias de esta semana pasada aliviarán algo la situación?

Las lluvias han sido débiles y las necesidades son muy grandes, con lo que la lluvia, siempre necesaria, ha sido insuficiente para cubrir esa gran necesidad de humedad que tiene el terreno, y los árboles para realizar un crecimiento normal, sobre todo en la zona de secano, donde no hay aporte de agua por medio de riego localizado como en otras zonas de la provincia de Alicante.

Lo cierto es que cuando no es la sequía son las lluvias excesivas y a destiempo o la falta de polinización, pero llevan ya unos años que no levantan cabeza...

El cerezo es un cultivo al que afectan los cambios en el clima, y es uno de los primeros en sentir el cambio climático, que afecta en gran medida al cultivo, porque ya hace décadas que lo vamos observando, pero en los últimos años se ha incrementado este efecto, con gran importancia socioeconómica para la zona de influencia.

¿Afecta el problema a toda la zona productora de la provincia?

En gran parte sí, pero hemos visto una mayor afección sobre la zona de producción más temprana, con menor altitud sobre el nivel del mar, como la Marina y el Comtat, que sufre en gran medida los inviernos más suaves, con menor acumulación de horas frío, que es muy importante para una buena vegetación del cultivo.

¿Estos problemas provocan el desánimo de la gente joven a la hora de impulsar el necesario relevo generacional en el sector?

Son tan importantes que están haciendo que se abandonen explotaciones en estos últimos años, con gran incremento de abandono, y por supuesto con falta de relevo, porque ¿quién se quiere dedicar a un cultivo que no es rentable o que hace que los agricultores de la zona pierdan dinero? La falta de rentabilidad es el principal problema del cultivo actualmente.

¿Qué caracteriza a la Cereza de la Montaña de Alicante?

Es una cereza muy apreciada en la zona mediterránea, porque se cultiva muy cerca de la zona principal de consumo, y es un producto muy fresco, que llega al día siguiente al consumidor, y por tanto ofrece toda su frescura, su sabor, su color y sus características saludables al consumidor directamente, sin pasar varios días en los mercados, y por tanto sin perder nada de su hábitat natural, con lo que es muy apreciada por el consumidor de la zona de Levante, y también de otras zonas, aunque ya no consigue esa proximidad.

¿Está suficientemente reconocida la calidad de la Cereza de la Montaña de Alicante a nivel provincial, nacional e internacional?

Creemos que en la zona sí, y que es más difícil en otras zonas, porque hay también otros productores que pueden ofrecer un buen producto, pero nunca tenemos problemas con ella, porque la cereza es una fruta de temporada muy apreciada y muy buscada.

¿Qué función realiza el Consejo Regulador?

El Consejo Regulador de la IGP vela por la calidad de la cereza que va con el sello de nuestra indicación protegida, para que sea una cereza que cumpla con los estándares de calidad que marca nuestro sello y para que no se mezclen con otras cerezas que no estén controladas y que puedan ser de menor calidad.

¿Qué le parece la iniciativa de «Menjars de la Terra» de impulsar los productos autóctonos alicantinos?

Es una gran oportunidad para dar a conocer nuestros productos, que son muy buenos y además tenemos la ventaja de la proximidad, que en productos como el nuestro, que son perecederos, es muy importante para que la calidad sea máxima. Un buen producto, que llega tarde al mercado, se puede convertir en un mal producto, por lo que «Menjars de la Terra» es una gran iniciativa para fomentar y explicar todos estos productos, entre los que se encuentra la cereza.

¿Qué cualidades gastronómicas destacaría de la Cereza de la Montaña de Alicante?

Son muchas, además del consumo en fresco que es el principal, pero cada día más, se usa para que los restauradores puedan elaborar platos diferentes y que crean un menú más variado, más de la tierra y así, representar más los valores de nuestro entorno, que son muchos y muy preciados.