La semana que termina ha supuesto un nuevo escalón en la pugna de España con "los mercados", al consolidarse el diferencial entre el bono a 10 años y el bund alemán por encima de los 300 puntos (pagando intereses cercanos al 6%). La pregunta es si se ha alcanzado el punto de no retorno (es decir, el momento en el que el rescate del país -o, más bien, de sus acreedores- es inevitable). Probablemente, aún no se ha llegado, pero estamos más cerca que nunca, desde que los griegos sufrieron las primeras muestras de desconfianza (en 2009) y se dijo que "España no era Grecia".

Según los expertos, el umbral sin vuelta atrás se alcanzaría si se consolidara una distancia de 400 puntos entre el bono y el bund, con un tipo de interés del 7% a pagar por España. Entonces, a la vista de los precedentes irlandés o portugués, el rescate sería cuestión de tres o cuatro semanas. El problema es que, según pasa el tiempo, nos vamos quedando sin margen de maniobra.

Por un lado, tenemos un gobierno en fase terminal, incapaz de hacer reformas que disuadan a los mercados de atacar nuestra deuda pública. Por el otro, está la extensión del incendio a otros países (como Italia), que contagian a España y le acercan al grupo de rescatados. Finalmente, la descoordinación en la eurozona, con intereses cada vez más contrapuestos (Alemania y sus aliados, partidarios de reestructuraciones de la deuda, de manera que los bancos asuman pérdidas y no se cargue más a los contribuyentes; los periféricos, defensores de la creación de eurobonos, respaldados por un Tesoro común, lo que frenaría los ataques de los especuladores). Llegados a este punto (y aunque el griterío mediático-político arremeta contra Merkel o las agencias de calificación, eludiendo las propias responsabilidades), ya no es hora de preguntarse si se producirá el rescate, si no cuándo.

Cómo lo ven. Cinco meses después de haberse iniciado el asedio a Muamar el Gadafi, con una rebelión en el frente oriental, bombardeos de la OTAN y sanciones internacionales, el coronel sigue ahí. ¿Cómo es posible? Una primera respuesta la proporciona un análisis de Reuters: pese al embargo que pesa sobre el gobierno libio, la porosidad de la frontera con Túnez (a la hora de obtener combustible, por ejemplo) y el control de una refinería en su territorio aún le permiten resistir. ¿Hasta cuándo?

The Wall Street Journal analiza un informe de Brookings Institution, donde se muestra que los ingresos de las familias estadounidenses crecieron durante los últimos 35 añosÉ a costa de trabajar más horas. Así, si las ganancias medias familiares aumentaron un 23% entre 1975 y 2009 (hasta los 70.000 dólares anuales), las horas de trabajo lo hicieron en un 26% (de 2.800 a 3.500 horas anuales).

Cómo nos ven. Ambrose Evans-Pritchard, analista del Daily Telegraph, advertía de que, una vez la crisis de la deuda está en "fase de metástasis", tanto España como Italia deberán esperar un milagro para no ser rescatadas (como Grecia, Irlanda y Portugal). Todo empezó con las críticas de Berlusconi a su internacionalmente respetado ministro de Finanzas, Giulio Tremonti, lo que elevó el riesgo país transalpino y contagió a España. Veremos cómo apagan el fuego.

Time resalta el sorprendente (o no tanto) robo del Códice Calixtino de la catedral de Santiago de Compostela. Así, se señala que "la vigilancia no era muy estrecha", pese a las advertencias hechas en ese sentido a los responsables catedralicios. Por otra parte, la policía que investiga el caso sigue sin descartar ninguna hipótesis: desde que haya sido obra de alguien que no era consciente de lo que tenía entre manos hasta que fuera el trabajo de un profesional, por encargo de un coleccionista privado.

Qué se cuece. El escándalo suscitado por las escuchas del (ya cerrado) News of the World ha dañado gravemente la credibilidad del grupo News Corporation, propiedad de Rupert Murdoch. Ante esta situación, el citado The Wall Street Journal (también en manos del magnate australiano) señalaba que el grupo de comunicación de Murdoch estaría estudiando la posibilidad de poner a la venta el resto de cabeceras británicas (entre las que se encuentran el sensacionalista The Sun o The Times).

233grados.com se hacía eco de un informe de The Economist, donde se señalaba el notable crecimiento de la venta de periódicos en países emergentes (lo que contrasta con el estancamiento o descenso en países desarrollados). Así, la India se ha convertido en el mercado más atractivo, al registrar un aumento del 40% entre 2005 y 2009 (por encima de China, con subidas del 10% durante dicho período).