Son varios los aspirantes, pero al final será sólo uno
el que se quedará con el crédito del IVF, que saldrá a subasta el 1 de diciembre. El que más chifle, capador.
Muy optimista estaba el miércoles Manuel Illueca, director del banco del Consell, cuando señaló que «en Navidad nos comeremos el turrón con la venta del Elche resuelta». De las palabras a los hechos va un abismo y los antecedentes no invitan al optimismo. Si hace unos días el grupo inversor Only One Way SL encontró buenas palabras dentro del consejo franjiverde y le dejaban las puertas abiertas, ahora ya se sabe que José Sepulcre está dispuesto a presentarse a la subasta y el empresario navarro Luis Oliver también comparte mesa y mantel. Existe también algún tapado entre bambalinas. La versión de «Piensos Coinsa», telonera del filme de Skyline Internacional, que apareció en el cartel de la pasada temporada, lleva camino de repetirse en el cine del estadio Martínez Valero, aunque en esta ocasión los actores son de aquí, hablan la lengua del fútbol español, y van en serio. José Miguel Garrido es un conocedor del fútbol y está dispuesto a presentarse en la subasta el día 1 de diciembre con un aval supervisado por el Banco Central Europeo para poder hacer frente, cuando llegue, a la sanción de 4,1 millones de euros de Bruselas. Si Oliver y Sepulcre también lo tienen, ya saben lo que deben hacer, ponerlo en la mesa del banco del Consell y el que más chifle, capador. El momento en el que se encuentra el club es muy peligroso y ahora, más que nunca, se necesita una inyección económica. Este consejo siempre ha dicho que, si viene alguien, pone una alfombra roja. El inversor ya está en la puerta, ¿y la alfombra? O Sepulcre pone el dinero o la alfombra. Este Elche no está para «okupas», sencillamente porque necesita un dueño.