El Elche CF se supera a sí mismo cada día y cada vez se asemeja más al denominado «Incident CSX8888» que inspiró la película Unstoppable, protagonizada por Denzel Washington, en la que un tren de carga sin maquinista y fuera de control avanzaba hacia el precipicio a una velocidad endiablada. Mientras Pacheta y sus jugadores buscan su primer triunfo de la temporada, dando en cada partido todo lo que llevan dentro y demostrando su profesionalidad, los dirigentes del club se han empeñado en que el tren descarrile. Un día es el tema de los médicos, a los que se ningunea después del gran trabajo que realizaron la pasada campaña para que el equipo volviera al fútbol profesional; otro, el vallado de los terrenos colindantes con el anexo en vísperas del España-Croacia; el siguiente, llega el veto a un periodista. Y, por si faltara algo, esta semana le ha tocado a Edu Albacar, un emblema del franjiverdismo que tiene escritas páginas en el libro de oro del club y que ha sido obligado a salir por la puerta de atrás. Mañana, ¿a quién le tocará ser señalado? Bueno, a este diario, como represalia por solidarizarse con el periodista vetado le han negado esta semana las entrevistas o reportajes personales a la que el resto de medios tienen derecho cada 15 días. El tren del despropósito en el Elche CF avanza sin que nadie sea capaz de pararlo. La entidad está judicializada, las películas de los inversores que pueden llegar a salvar a la entidad ya están repetidas hasta la saciedad y nunca se hacen realidad. La credibilidad está por los suelos y el abismo cada día más cerca. Propensos a señalar como culpables del desastre siempre a otros, llámese Javier Tebas, Éibar o Juan Anguix, convendría que todos los que llevan al Elche CF muy dentro dieran un paso adelante y salieran en su defensa en vez de estar escondidos detrás de la mata. En estos casos no me canso de repetir aquella frase de John F. Kennedy que dijo: «No preguntes lo que tu país (Elche CF) puede hacer por ti; pregunta lo que tú puedes hacer por tu país (Elche CF)». En el «Incident CSX8888», el tren es detenido con la ayuda de los maquinistas de una segunda locomotora, la cual pudo alcanzar el tren fuera de control y acoplarse al último vagón. Lo que deja claro es que la utopía existe. Lo que no se puede permitir es que el Elche esté en manos de gente que busca más su interés personal que el del club, que utilicen las redes sociales para contar su cuitas y amedrentar al que no comulga con ruedas de molino... PD.Bien haría el club ilicitano en aclarar algunas de las acusaciones del exjugador franjiverde Edu Albacar. Ha dicho que casi todos los futbolistas llegan al club a través del mismo representante, lo del coche del presidente... El excapitán ha dejado claro en su escrito de denuncia que en la secretaría técnica ha visto «cosas raras, muy raras». Jorge Cordero tendrá que explicarlo esta mañana.
Desde la glorieta