Hay esperanza para el agua

Se ha consumado. Ha sido una decisión política que advertíamos y que ha supuesto un golpe muy duro, casi definitivo, a cerca de cincuenta años de trasvase del Tajo a las tierras del Levante Español. Y no existe razón técnica alguna que pueda justificar el Plan de Cuenca del Tajo. Se trata de política y voluntad. Nada más. O sí, algo más: PSOE. Porque este partido lleva más de treinta años queriendo ahogar y convertir en tierra seca y muerta a nuestra provincia. Los hechos lo acreditan: la eliminación del trasvase del Ebro fue el primer paso. Ocurrió en 2004 en los primeros meses del gobierno de Zapatero (con el voto favorable para su derogación del actual y todavía alcalde de Elche, diputado nacional entonces). Años más tarde, al llegar nuevamente el PSOE a la Moncloa, vendría la progresiva eliminación del trasvase del Tajo al Segura. Y por la puerta de atrás: vulnerando la propia Ley del Memorándum promovida por el gobierno del PP y que contaba con la aprobación de Castilla-La Mancha con María Dolores de Cospedal al frente del ejecutivo regional. Y lo han conseguido.

La recuperación de la reserva de agua en la cabecera del Tajo obliga al Gobierno a volver al trasvase máximo mensual

El PSOE lleva más de treinta años queriendo ahogar y convertir en tierra seca y muerta a nuestra provincia.

 Pero hay datos que son irrefutables con respecto a quién destruye y quién construye y blinda. Porque somos lo que hacemos.

"Guerra"

Muchos de ustedes afirmarán estar cansados ante la “guerra” del agua. Pero es que esa “guerra” estaba superada desde 2013 con la ley ya referida en tanto que la ley puso de acuerdo a cinco gobiernos regionales. Ese conflicto estaba superado… y ha sido suscitado y actualizado ahora con el PSOE al frente del Gobierno de la Nación. Y siempre ocurre lo mismo y es desalentador: vuelven al gobierno y vuelta al conflicto por el agua, pero sólo en la que ha de llegar al levante de España.

 Hablemos de infraestructuras hidráulicas. Los trasvases son buenos y necesarios. En nuestro país tenemos ejemplos históricos formidables en Castilla o Aragón de grandes infraestructuras para el agua. Nuestro país es el líder mundial en número de presas y embalses por población y esto permite que seamos la despensa de Europa. Y la política nacional buscando el mejor reparto y la distribución del agua ha sido cuestión de Estado desde la constitución del propio estado moderno con Carlos I y Felipe II. Pero es que no podemos eludir que el Tajo-Segura, que comienza su andadura a finales de la década de los 60, surge de los planes estatales de la II República y antes de Primo de Rivera para canalizar, a través del agua, la necesaria solidaridad nacional. 

Y la Ley de 2013 que blinda el trasvase y que, también, prioriza a los territorios ribereños del Tajo es buena y se tiene que cumplir. Y este decreto político vulnera la ley, además de ser profundamente insolidario.

Tajo

 Y añadimos más. El caudal en el nacimiento del Tajo, en el bellísimo Sistema Ibérico, ha sido siempre el mismo. No brota más agua ni menos (de media) que hace un milenio en este lugar único en plena sierra de Albarracín. Si el Tajo, en todo su curso por Madrid y Castilla-La Mancha, tiene un caudal regular anual ponderado y equilibrado es gracias a los dos embalses (Entrepeñas y Buendía) que se construyeron, precisamente, para nuestro trasvase. Todos los argumentos pseudo-científicos a los que se ha hecho referencia para justificar este atropello son, simple y rotundamente, mentira. Y el Levante recibe lo que es excedente en esos embalses, que para esto se hicieron.

 Pero hay esperanza. No estamos en política ni para lamentos ni para llantos. Estamos para buscar soluciones y para plantear alternativas a los problemas, aunque éstos estén generados, como casi siempre ocurre en estos últimos años, por el sanchismo.

 De este modo: vamos a luchar con todas las herramientas jurídicas posibles para revertir esta infamia. Lo vamos a hacer desde la propia Diputación Provincial y ante todos los tribunales .

 Y lo vamos a hacer recurriendo a todos los órganos competentes del estado de derecho para exigir algo algo que es fundamental en democracia: las leyes se tienen que cumplir. Y la Ley de 2013 que blinda el trasvase y que, también, prioriza a los territorios ribereños del Tajo es buena y se tiene que cumplir. Y este decreto político vulnera la ley, además de ser profundamente insolidario.

Beneficiadas

 Por todo ello: a la lucha social y legal para defender el futuro del Trasvase. Porque haciéndolo no sólo estamos luchando por el agua que riega y da beber a nuestras tierras, sino que también luchamos por las cuencas de ribera del Tajo, que han de ser las primeras y más beneficiadas por el Trasvase. A la lucha por la justicia frente a un PSOE desatado e irresponsable contra Alicante y Elche, que ha decidido enterrarnos en tierra sedienta y sin futuro. A la lucha por la ley y por el agua, que es de todos, y que el Trasvase nos trae y nosotros cuidamos hasta en su última gota. A la lucha. Hay esperanza.