La sociedad civil valenciana se hizo esperar. Convocados en el Veles e Vents para las 20.30 horas por el Gobierno de Alberto Fabra, el acto empezó con 15 minutos de retraso y con la oposición, los sindicatos y las universidades como grandes ausentes. El edificio de la Marina Real de Valencia, teñido con una senyera de luz que tintó sus paredes durante el acto, se llenó, eso sí, de representantes de entidades y personalidades del mundo social, cultural, económico, educativo y político valenciano.

Al acto convocado desde el Gobierno de Alberto Fabra, el presidente de la Generalitat llegó acompañado por el presidente de Ford España y los principales representantes políticos de la Comunitat Valenciana. Entre ellos los alcaldes de Valencia y Castelló, Rita Barberá y Alfonso Bataller; la delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León y los consellers de Educación y Economia, María José Català y Máximo Buch. A su alrededor, la parte de la sociedad valenciana que hoy ha decidido apoyar a Alberto Fabra.

Como si de un festival de música se tratara, a la entrada se entregó a cada uno de los asistentes una pulsera turquesa con el lema 'x CV' que les identificó durante toda la velada como privilegiados asistentes al evento. Con la entrega de la pulsera, una invitación a posar en el photocall oficial. Ya allí, en la entrada junto al mar, podía intuirse que el asfixiante calor de los últimos días iba a adueñarse del evento, en el que hombres y mujeres no dejaron de mover los abanicos.

Pasadas las 20.45 horas comenzaba por fin el acto, conducido por la presentadora Nuria Roca, quien se mostró orgullosa de ser "valenciana de Moncada" y leyó los seis compromisos de los firmantes del pacto. A continuación intervino la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que valoró el acto como un "llamamiento para pasar a la acción" y no perdió la oportunidad para criticar a aquellos que "parecen sospechosamente empeñados en denigrar" su posición como alcaldesa de Valencia. Le siguió el presidente de Cruz Roja Comunitat, Fernando del Rosario, que se centró en la importancia de atender a los más desfavorecidos.

A continuación tomó la palabra Javier Quesada, investigador del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), que puso especial atención en reclamar un mejor modelo de financiación. "No se trata de sentimientos, sino de contabilidad", reivindicó. Recogió el testigo el presidente de Ford España, José Manuel Machado que se metió a la audiencia en el bolsillo con un discurso lleno de anécdotas personales y empresariales entre las que destacó la reunión mantenida con el presidente de la Generalitat en vacaciones aprovechando su estancia en un hotel. Machado mostró especial soltura cuando, sin dejar de hablar, sacó del pantalón su móvil para ver quién le estaba llamando y procedió a apagarlo. Machado, por supuesto, centró su discurso en la importancia del Corredor Mediterráneo para la factoría de Almussafes y confesó entusiasta que "no podríamos entender Ford sin pensar en Valencia". "Las cosas en Ford Almussafes van excepcionalmente bien", aseguró.

Finalmente llegó el esperado turno de palabra de Cristina Tárrega. Las críticas y la polémica que ha suscitado su participación en el acto de hoy como representante de la sociedad civil valenciana desde que se conociera, no han parecido influir en la presentadora valenciana que ha subido a la tribuna sin un discurso escrito y durante cinco minutos ha reivindicado el orgullo de sentirse valenciano. "Valencia es muy grande y nosotros somos muy poderosos porque tenemos ganas. Soy valenciana y los valencianos podemos. Siempre hemos podido". Con estas palabras ha comenzado una intervención entusiasta en la que ha comparado la C. Valenciana con Andalucía, de donde es su marido, y ha asegurado sentirse feliz "porque mi comunidad está preciosa, mis amigas tienen un poco más de trabajo, entra algo más de dinero". Tárrega ha citado a Porcelanosa y Mercadona como ejemplos a seguir y ha manifestado su deseo de volver a vivir a Valencia en un futuro -"mi ilusión es volver y ver crecer a mi hijo aquí"-. "Valencia la sacamos nosotros adelante si España nos deja", ha concluido.

Tras el vendaval Tárrega cerró el acto el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, que con un discurso centrado en las reivindicaciones que han vertebrado sus últimas intervenciones públicas, con menciones al agua, el Corredor mediterráneo y la exigencia de un mejor modelo de financiación, hizo un llamamiento a la unión de todos los valencianos para salir de la crisis. "Hago un llamamiento a todas las personas para que se unan a este "gran acuerdo". Que nadie tenga dudas de que este es un pacto liderado por los que gobiernan la historia: los ciudadanos", ha garantizado, después de las críticas recibidas los últimos días por la ausencia de voces críticas en el acto.