Las leyes tampoco se libran de la tijera. Alberto Fabra anunció ayer en la convención nacional del PP de Valladolid una revisión en profundidad de las 135 normativas autonómicas que existen en la Comunidad. Durante su participación en un coloquio sobre la España productiva, el presidente del PPCV destacó la importancia de contar con una administración «más ágil» y «eficiente». ¿Cómo conseguirlo? El también titular del Consell dio dos propuestas. La primera, la supresión de un buen número de normativas. «En la Comunidad Valenciana tenemos 135 leyes. He pedido (a las consellerias) que se revisen todas porque estoy convencido de que podemos funcionar con menos», apuntó. Fabra citó el ejemplo de la nueva Ley de Ordenación de Territorio, Urbanismo y Paisaje, que refundirá la anterior norma y reducirá de 1.200 a 273 el número de artículos.
La segunda iniciativa que presentó el presidente también está relacionada con las leyes. El jefe del Consell anunció que ha trasladado una propuesta a los empresarios de la Comunidad para que le detallen qué 10 normas autonómicas se han convertido en una cortapisa para impulsar nuevas empresas y, por lo tanto, la creación de empleo. «Vamos a modificarlas o suprimirlas», apostilló.
Fabra levantó los aplausos del auditorio en una sola ocasión. Mediada su tercera intervención -sus discursos se fueron intercalando con los del ministro de Industria, José Manuel Soria-, el presidente del PPCV hico su única reivindicación pública. «Queremos que todas las comunidades autónomas tengan los mismos ingresos para poder cubrir los gastos sociales», afirmó, en alusión al nuevo sistema de financiación que se aprobará de cara a 2015. Nada más pronunciar esa frase, los asistentes a la convención comenzaron a aplaudir. Especialmente, la nutrida representación de dirigentes de la Comunidad que se han desplazado este fin de semana hasta la capital vallisoletana. Entre ellos, el presidente provincial del PP en Alicante, José Císcar. Ahí quedaron todas las reivindicaciones de Fabra. Pese a que los expertos designados por el Ministerio de Hacienda admitieron este pasado viernes el expolio que sufre la Comunidad Valenciana con el actual sistema de reparto de fondos, el jefe del Consell evitó elevar el tono.
La inmensa mayoría de sus intervenciones versaron sobre la importancia de las infraestructuras productivas y sobre la necesidad de poner al ciudadano en el epicentro de las políticas. Buena parte de su tiempo lo dedicó a ensalzar el Corredor Mediterráneo. «Necesitamos infraestructuras productivas, no nos podemos permitir el lujo de otra cosa. No es momento de frivolidades y resulta fundamental priorizar. El Corredor Mediterráneo, por ejemplo, va a tener un retorno del 11 %», detalló.
Fabra, por último, también tuvo tiempo para recordar la «herencia» de José Luis Rodríguez Zapatero. Aseguró que el Plan E solo sirvió para «camuflar» las cifras del paro durante un tiempo, le acusó de engordar la administración en plena crisis y recordó el «agujero» de 40.000 millones que dejó.
Errores
De la representación valenciana también intervino ayer en el cónclave el vicesecretario de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons. Fue el único que mentó el caso Bárcenas, aunque de manera indirecta. «Hemos cometido errores, entiendo lo que habéis sentido todos nuestros afiliados y, por eso, con humildad hemos pedido perdón y tomado medidas. No volverá a ocurrir. Un partido es también el espejo en el que quieren mirarse sus votantes», proclamó.
