El jefe del Consell aprovechó su viaje a Madrid para reunirse con el Ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y pedirle dinero. No le quedaba otra salida para disponer de liquidez y poder cerrar el ejercicio. Así que Fabra, sin financiación que acabe con la discriminación de la Comunidad y sin fuerza política para reclamar los 14.500 millones de la deuda histórica, se sentó en el despacho de Montoro para pedirle otro préstamo de los sobrantes del fondo de rescate. Fabra aspiraba a unos 600 millones de los restos del Fondo de Liquidez. Puede que sea más dinero. El resto de autonomías no quieren sumar más deuda. P. r. f.