5 cosas que haces a diario y que debes dejar de hacer si quieres vivir más y mejor

Incorpora estos hábitos saludables a tus rutinas del día a día para mejorar tu salud y tu bienestar

5 cosas que debes cambiar en tu día a día para vivir más y mejor.

5 cosas que debes cambiar en tu día a día para vivir más y mejor. / PIXABAY

Azucena Mendieta Delgado

Azucena Mendieta Delgado

En la rutina diaria, solemos adoptar hábitos que, aunque parecen inofensivos, pueden estar alejándonos de alcanzar una vida más larga y satisfactoria. A continuación, exploramos cinco prácticas cotidianas que deberíamos reconsiderar para mejorar nuestra salud y bienestar general. Implementar estos cambios puede ser el primer paso hacia una vida más feliz y saludable.

El secreto de la longevidad: 5 cosas que haces todos los días y que debes cambiar

1. No estés mucho tiempo sentado

Numerosos estudios han vinculado el sedentarismo, especialmente el tiempo prolongado sentados, con un aumento en el riesgo de enfermedades crónicas, incluyendo enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, y obesidad, así como una reducción en la esperanza de vida. La vida moderna nos empuja a pasar horas frente a pantallas, ya sea por trabajo o entretenimiento, contribuyendo a este problema.

Para empezar a cambiar ya este hábito puedes optar por varias cosas. En primer lugar, integra el movimiento en tu rutina. Levántate cada hora de la silla del trabajo o del sofá si estás viendo la tele, aunque sea por unos minutos. Usa escaleras en lugar del ascensor.

2. Duerme más y mejor

Un sueño insuficiente o de mala calidad está asociado con una multitud de problemas de salud, como la obesidad, enfermedades cardíacas, hipertensión, y deterioro cognitivo. Además, afecta nuestro estado de ánimo y productividad.

DORMIR | Los siete alimentos prohibidos que no debes comer por la noche para evitar el insomnio

Dormir bien es fundamental para llevar un vida saludable. / INFORMACIÓN

Para cambiar este mál hábito y dormir como un bebé es recomendable establecer una rutina. Acuéstate y despiértate a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana. Además, es imporante preparar el ambiente. Asegúrate de que tu habitación sea un santuario de sueño: oscura, fresca y tranquila. Por último, cuida tu alimentación por la noche y evita dispositivos electrónicos al menos una hora antes de dormir.

3. Come menos azúcar

El exceso de azúcar añadido en nuestra dieta contribuye al riesgo de enfermedades como la diabetes tipo 2, enfermedades del corazón y obesidad. Además, puede llevar a problemas dentales y a un envejecimiento prematuro.

Para cambiar este hábito y reducir tu consumo de azúcar te recomendamos leer las etiquetas de los alimentos. Familiarízate con los nombres del azúcar añadido y verifica las etiquetas. Otro conjeo es que tomes más frutas, verduras y granos enteros. Además, todo esto siempre es más fácil si cocinas en casa. Al preparar tus comidas, controlas la cantidad de azúcar que consumes.

4. Practica más deporte

La actividad física regular no solo ayuda a controlar el peso, sino que también reduce el riesgo de enfermedades crónicas, mejora la salud mental, el sueño y aumenta la esperanza de vida.

Una buena forma de hacer más deporte es encontrar una actividad que disfrutes. Ya sea caminar, nadar, bailar o andar en bicicleta. Además, es importante establecer unas metas realistas. Comienza con objetivos pequeños y aumenta la intensidad gradualmente. Y si quieres hacer deporte sin darte cuenta, incorpora el ejercicio en tu rutina diaria. Opta por caminar o ir en bicicleta al trabajo, usa las escaleras, juega con tus hijos o mascotas.

5. Gestiona mejor el estrés

El estrés crónico puede llevar a problemas graves de salud, incluyendo enfermedades cardíacas, ansiedad, depresión, y otros trastornos. Aprender a manejarlo es crucial para nuestra salud física y mental.

Aunque parezca complicado reducir el nivel de estrés en nuestro día a día es posible. Una buena forma de intentarlo es mediante la practica de mindfulness y meditación. Dedica tiempo cada día a practicar la atención plena o la meditación. También es buena idea que inviertas parte de tu tiempo en realizar actividades recreativas. Encuentra hobbies o actividades que te relajen y te hagan feliz. Y no dudes nunca en buscar apoyo. Habla con amigos, familiares o profesionales si te sientes abrumado.

Cambiar hábitos arraigados puede ser desafiante, pero con determinación y estrategia, es posible transformar nuestra vida diaria en una más saludable y plena. Empezar por pequeños ajustes puede llevarnos a lograr grandes mejoras en nuestra salud y bienestar. Recuerda, el objetivo no es solo vivir más, sino vivir mejor.