¿Qué pasa si haces flexiones todos los días?

Descubre las consecuencias de realizar a diario este entrenamiento

¿Qué pasa si haces flexiones todos los días?

¿Qué pasa si haces flexiones todos los días? / pexels

Azucena Mendieta Delgado

Azucena Mendieta Delgado

Las flexiones, también conocidas como lagartijas o push-ups en inglés, son un ejercicio de fuerza que se realiza principalmente para fortalecer los músculos de la parte superior del cuerpo, especialmente los pectorales, deltoides, tríceps y músculos de la espalda.

¿Qué pasa si haces flexiones todos los días?

Hacer flexiones todos los días puede tener varios efectos en tu cuerpo y condición física. Aquí hay algunos aspectos a considerar:

  1. Fortalecimiento muscular: Las flexiones son un ejercicio efectivo para fortalecer los músculos de la parte superior del cuerpo, especialmente los pectorales, deltoides, tríceps y músculos de la espalda. Al hacer flexiones regularmente, puedes aumentar la fuerza y la resistencia de estos músculos.
  2. Mejora de la resistencia: Al trabajar los músculos de manera repetitiva y constante, aumentarás tu resistencia física. Con el tiempo, podrás hacer más repeticiones de flexiones antes de fatigarte, lo que indica un aumento en tu resistencia.
  3. Estabilidad del core: Las flexiones también ayudan a fortalecer los músculos estabilizadores del core, como los abdominales y los músculos de la espalda baja. Esto puede mejorar tu postura y estabilidad en general.
  4. Riesgo de lesiones: Hacer flexiones todos los días puede aumentar el riesgo de lesiones si no se realiza correctamente o si no das a tu cuerpo suficiente tiempo para recuperarse. Es importante mantener una técnica adecuada y escuchar a tu cuerpo. Si sientes dolor o molestias intensas, es recomendable descansar y permitir que tus músculos se recuperen.
  5. Adaptación: A medida que tu cuerpo se acostumbra a hacer flexiones todos los días, es posible que alcances un punto de estancamiento en el que ya no experimentes mejoras significativas. En ese caso, podrías considerar variar tu rutina de ejercicios para seguir desafiando a tus músculos y continuar progresando.

Recuerda que es importante tener un enfoque equilibrado en tu rutina de ejercicios. Combinar las flexiones con otros ejercicios que trabajen diferentes grupos musculares y dedicar tiempo suficiente para descansar y recuperarte es fundamental para mantener un entrenamiento efectivo y seguro.

Cómo hacer flexiones correctamente

Para hacer flexiones, sigue estos pasos:

  • Comienza colocándote boca abajo en el suelo, apoyando tus manos a la altura de los hombros, ligeramente más anchas que el ancho de los hombros. Tus palmas deben estar planas sobre el suelo y los dedos apuntando hacia adelante.
  • Extiende las piernas hacia atrás, apoyándote sobre las puntas de los pies. Tu cuerpo debe formar una línea recta desde los talones hasta la cabeza.
  • Mantén tu core (zona abdominal y músculos de la espalda baja) activado para mantener una posición estable durante todo el ejercicio.
  • Baja lentamente tu cuerpo hacia el suelo flexionando los brazos. Mantén los codos cerca del cuerpo y los hombros hacia abajo y hacia atrás. Continúa bajando hasta que tu pecho casi toque el suelo, manteniendo el cuerpo recto.
  • Luego, empuja con fuerza a través de las palmas de las manos para estirar los brazos y elevar tu cuerpo de nuevo a la posición inicial. Mantén los músculos contraídos durante todo el movimiento.
  • Repite el movimiento varias veces, controlando el descenso y el ascenso, manteniendo una buena técnica y respirando de manera adecuada.

Las flexiones pueden modificarse para adaptarse a diferentes niveles de condición física. Por ejemplo, si eres principiante, puedes apoyarte sobre las rodillas en lugar de los pies para reducir la resistencia. A medida que aumentes tu fuerza, puedes progresar hacia flexiones completas con los pies apoyados.

Recuerda que es importante hacer las flexiones correctamente para evitar lesiones y maximizar los beneficios. Siempre es recomendable consultar a un profesional del fitness o entrenador personal para asegurarte de que estás realizando los ejercicios de forma adecuada.