Las botas utilizadas por Julia Roberts en la película "Pretty woman" o las centenarias zapatillas "Converse all star", utilizadas en "West side story", son algunos de los modelos expuestos que han marcado tendencia dentro y fuera de la gran pantalla, con un público que ha asumido estas modas en su estilo de vida.

Si bien los zapatos de plataforma marcaron una época en la historia de España y se pusieron de moda con películas como "Fiebre de sábado noche", otros, alejados de lo frívolo y de corte más obrero, como las famosas "Dr. Martens", saltaron a la fama con "La naranja mecánica" de Stanley Kubrick y pasaron a ser un icono entre los jóvenes más transgresores de los años sesenta y setenta.

Algunos estilos como el 'look' obrero y militar han seguido de moda hasta finales de los noventa, y junto con las míticas 'all star', han abanderado movimientos musicales como el 'grunge' desde los pies del fallecido Kurt Cobain del grupo Nirvana.

Otros han vuelto a renacer en los escaparates de comercios y desfiles de moda emulando los zapatos de baile "bicolor" que calzaba el polifacético Fred Astaire en la mayoría de sus interpretaciones.

Los zapatos rojos de Kelly Lebrock en "La mujer de rojo" o las bailarinas de Audrey Hepburn están representadas también en la exposición y ponen de manifiesto que ninguna tendencia mostrada en el cine, por más escandalosa o transgresora que fuera, ha pasado inadvertida.

Y es que diversos estudios sociológicos realizados en la últimas décadas han mostrado que existe una clara relación entre el calzado y la personalidad, una conclusión a la que probablemente ya habían llegado los guionistas y grandes directores de cine antes de concebir a míticos personajes.

Las botas vaqueras de Dustin Hoffman en "El expreso de medianoche", o las obreras de Marlon Brando en "The wild one", definen al prototipo de "chico duro" o transgresor, mientras que las sandalias de plataforma tipo 'peep toe' utilizadas por la actriz Rita Hayworth en "Gilda", y todavía vigentes en la moda cotidiana, invocan a la mujer sensual, elegante y seductora.

En definitiva, John Travolta no hubiera caracterizado de la misma manera su personaje sin sus zapatos, al igual que el icono de la sensualidad para muchos en los años noventa no hubiera tenido el mismo sentido si no hubieran visto la botas de Julia Roberts en "Pretty woman".

Aunque entre los asistentes que contemplaban esta exposición surgía la duda de si el famoso Forrest Gump, caracterizado por el actor Tom Hanks, habría corrido a la misma velocidad si no hubiera tenido que publicitar a una conocida marca americana de zapatillas.