Qué fue de los pinchazos a mujeres en las discotecas

Los casos de ataques por sumisión química que tanto proliferaron el pasado año parecen haber desaparecido

Mercedes Alfaro Rueda

Mercedes Alfaro Rueda

Hace unos meses, los titulares de los periódicos en España estaban repletos de historias de mujeres que denunciaban haber sido víctimas de pinchazos en pubs y discotecas. Estos ataques por sumisión química supuestamente tenían como objetivo drogar a las mujeres para facilitar robos y/o agresiones sexuales.

Sin embargo, últimamente, parece que este tipo de denuncias ha desaparecido de los medios de comunicación. ¿Qué ha pasado con estos casos? ¿Han dejado de ocurrir o simplemente han dejado de ser noticia?

El fenómeno de las "modas" en los sucesos

Para entender esta situación, es importante reflexionar sobre el fenómeno de las "modas" en los sucesos. En ocasiones, cuando una noticia trágica o impactante capta la atención del público, de repente surgen casos similares en todas partes. Un ejemplo de esto es el caso de las agresiones de perros a personas. Cuando una de estas noticias se vuelve viral, no es raro ver una oleada de informes similares en las semanas siguientes.

Estas "modas" en los sucesos pueden ser el resultado de varios factores. Por un lado, puede haber una mayor concienciación sobre un problema específico, o el interés de los poderes públicos por ponerlo en el primer plano del debate social, lo que lleva a un aumento en el número de denuncias.

En el caso de las mujeres pinchadas en pubs y discotecas, es posible que la atención mediática animara a más víctimas a presentar denuncias. Por otro lado, puede haber una tendencia a exagerar historias similares para llamar la atención o en busca de notoriedad.

Además, la competencia entre los medios de comunicación por captar la atención de los lectores y espectadores puede llevar a un enfoque desproporcionado en ciertos tipos de noticias. Cuando una historia tiene éxito en términos de audiencia, es posible que otros medios sigan la tendencia y publiquen noticias similares, incluso si no son representativas de un problema generalizado.

En el caso de las denuncias de pinchazos en pubs y discotecas, aunque la cantidad de casos reportados disminuyó, esto no significa necesariamente que el problema haya desaparecido. Es posible que los medios hayan dejado de informar sobre estos casos porque ya no se consideran novedosos o porque han sido reemplazados por otras "modas" de sucesos.

Es crucial abordar los problemas subyacentes que afectan a nuestra sociedad en lugar de centrarnos únicamente en las "modas" de los sucesos. Los medios de comunicación tienen una responsabilidad ética de proporcionar una cobertura equilibrada y contextualizada de los problemas. Como sociedad, debemos estar alerta y no dejarnos llevar por las tendencias, sino trabajar juntos para abordar y resolver los problemas que enfrentamos de manera colectiva.