La operación, denominada "Círculo", se puso en marcha el pasado mes de febrero con la colaboración de la Guardia Urbana de Barcelona con el objetivo de acabar con el tráfico de droga en los edificios de Eduard Aunós y de la Pantera Rosa en el barrio de La Marina, en Zona Franca.
La policía autonómica ha detenido en tres meses a 48 personas entre requerimientos judiciales de búsqueda e ingreso en prisión, por tráfico de drogas y por robo en el interior de vehículos.
Los Mossos han denunciado a 373 personas por consumo y tenencia de estupefacientes y a otras 33 por tenencia de armas, además, se han incautado de 1.000 papelinas de cocaína que en el mercado podrían haber alcanzado un valor de 60.000 euros y recuperar 18.000 euros en metálico.
El operativo "Círculo" ha permitido a la policía comprobar cómo los traficantes hacían obras en los pisos en los que vendían la droga, sin el correspondiente permiso municipal, para instalar variados elementos de seguridad como puertas blindadas y cámaras de seguridad, e incluso blindar el recibidor de sus casas.
A pesar del fuerte dispositivo policial, los Mossos detectaron que se seguía vendiendo droga y que los traficantes habían inventado un nuevo métodos que consistía en que una persona, denominada "puntera" en el argot policial, guiaba a los compradores hasta un piso, ubicado en la calle Riudoms.
Al llegar al piso, y siempre desde la calle, el comprador debía silbar y desde una ventana le tiraban una pinza atada a un hilo de pescar para que pusiera el dinero, tras recogerlo, le volvían a tirar el hilo con la misma pinza que sujetaba la papelina de droga.
El pasado 16 de mayo la policía llevó a cabo otra operación, en este caso denominada "Anzuelo", en un domicilio de la calle Riudoms en el que se seguía vendiendo droga.
La operación finalizó con la detención de Jessica M.B., de 29 años, nacionalidad española y vecina de Barcelona, además de la incautación de 50 papelinas de cocaína listas para su venta y con un valor en el mercado de unos 3.000 euros, diversas herramientas para el tráfico de drogas y 3.500 euros en metálico.
Las últimas investigaciones policiales permitieron detener el 20 de mayo a María Luisa M.M., de 41 años, con nacionalidad española y vecina de Barcelona, también por un delito contra la salud y por tráfico de drogas.
Las últimas dos mujeres detenidas quedaron en libertad con cargos tras declarar ante el juez.
