Un hombre con problemas mentales acabó ayer con la vida de su padre en Alicante. El supuesto homicida fue detenido horas después en la avenida de Dénia, al intervenir la Policía Local por estar este varón increpando a varias prostitutas, confesando entonces el suceso, según explicaron fuentes policiales y municipales.
El crimen ocurrió en la vivienda familiar de la calle Gorga, en el barrio Virgen del Remedio, en la noche del viernes al sábado. La hora en concreto se desconoce, aunque sobre las 2.00 de la madrugada el 112 recibió una llamada que alertaba de una agresión en la zona. La víctima, de 79 años, fue trasladada muy grave al Hospital General de Alicante tras ser golpeada en repetidas ocasiones con un objeto contundente de hierro, sobre todo en la cabeza. Al filo del mediodía se certificó su fallecimiento.
El arresto se produjo sobre las cuatro de la madrugada en la avenida de Dénia, muy lejos de la casa donde se registró el homicidio. La Policía Local acudió a la zona al recibir una llamada en la que se advertía de que un hombre estaba increpando y amenazando a unas prostitutas. Al llegar allí los agentes, el varón, de 49 años, les confesó sin tapujos que había agredido de forma brutal a su padre. La Policía Local trató de verificar esa información, confirmándoles la Policía Nacional de que se había producido tal suceso y procediendo por tanto a su arresto.
Mientras, tras el aviso al 112, la Policía Nacional ya se había desplazado al número 12 de la calle Gorga, perpendicular a la calle Diputado Joaquín Galant, junto al que era conocido como el "callejón de la muerte" de esta zona deprimida de Alicante. Allí encontraron al hombre malherido, siendo trasladado por una unidad del Servicio de Atención Médica Urgente (Samu) hasta el Hospital General de Alicante. Fuentes del Centro de Información y Coordinación de Urgencias (Cicu) informaron por la mañana que su pronóstico era reservado y que sufría un traumatismo craneoencefálico. Al parecer el hombre había sufrido graves daños cerebrales y sobre el mediodía se certificó su muerte.
El objeto contundente que empleó el agresor era un soporte que se usa para poner la caña de pescar y clavarla en la arena, y según informaron fuentes policiales el hombre iba contando a todo el mundo lo que había hecho. El detenido, que padece esquizofrenia, afirmó que oyó "unas voces" que le llevaron a acabar con la vida de su progenitor. Las fuentes consultadas no pudieron aclarar si había alguien más en la casa en el momento de la agresión, ya que su madre también vive allí y fue vista por vecinos ayer tarde en la zona.
Está previsto que durante la jornada de hoy pase a disposición judicial el detenido.
Vecinos dicen que
tenía graves problemas mentales y que no se tomaba la medicación
La noticia del trágico suceso sobresaltó ayer al barrio Virgen del Carmen, aunque lo cierto es que a algunos no les sorprendió. Vecinos de la zona explicaron que el supuesto agresor "está muy mal desde hace años, no por tema de drogas, sino de la cabeza. Tenía problemas mentales y no se tomaba la medicación, y sus padres, que son mayores -rondan los 80 años- no podían con él, aunque no nos consta que les hubiera pegado, aunque sí que les trataba mal". Por ello no les extrañó que haya acabado así, ya que "decía muchas cosas raras y la verdad es que daba miedo".
Otro vecino señaló que sobre las cuatro de la madrugada vio varias patrullas de la Policía Nacional en la zona, aunque otros residentes mostraron su perplejidad al conocer que había ocurrido un homicidio junto a su casa, asegurando que no sabían nada. La mujer de la víctima y madre del detenido, fue vista ayer tarde en la zona en compañía de varias personas. J.A.R.
