La Guardia Civil ha detenido a una de sus agentes adscrita al cuartel de Torrevieja por un supuesto delito de tráfico de drogas. La agente, perteneciente a la escala básica, se encontraba ayer retenida a la espera de pasar a disposición judicial, según confirmaron fuentes cercanas al caso consultadas por este diario. Este es el segundo caso de presunta corrupción que afecta en pocos días a miembros del Instituto Armado, ya que recientemente detuvieron en otra operación antidroga a otros dos guardias civiles de la provincia, que estaban destinados en Ibi aunque uno de ellos cambió al cuartel de San Vicente tras su implicación en otros hechos delictivos.
La detención de la guardia civil de Torrevieja fue realizada el pasado jueves y además del arresto la Benemérita acudió con el correspondiente mandamiento de entrada y registro en la vivienda de la agente. Durante el registro de la casa en el interior de una caja fuerte se halló un bolsa con cantidades reducidas de estupefacientes. Se baraja la posibilidad de que este piso fuera utilizado para guardar esa bolsa, perteneciente a amigos o conocidos del entorno de la ahora detenida, sin que tuviera vinculación directa con su comercialización en la calle, en un extremo que se está investigando.
Al parecer otra persona detenida esta semana en Torrevieja habría implicado a la guardia civil detenida, segun indicaron otras fuentes consultadas.
Violencia doméstica
La agente implicada, en un hecho del que se hizo eco la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), es la expareja de un sargento de la Guardia Civil que hace una semana fue denunciado por la ahora detenida por un supuesto maltrato en el ámbito doméstico. El mando fue arrestado a causa de esa denuncia y se le impuso una medida de alejamiento, aunque la agente después retiró esa denuncia.
La detención de esta guardia civil por tráfico de drogas se suma a otras tres realizadas desde principios del pasado mes de junio en la provincia. A finales del pasado julio la Guardia Civil arrestó a dos agentes que están pendientes de ser juzgados por falsear atestados y otros delitos en el cuartel de Ibi. En esta ocasión han sido implicados con una de las redes más activas que enviaba hachís de Marruecos a España. Su papel en la organización estaría relacionado con asegurar la llegada de los alijos al litoral mediterráneo.
El cuarto agente detenido en poco tiempo por tráfico de drogas fue detenido también por compañeros de mismo cuerpo en una operación realizada a principios de junio en El Campello y San Vicente del Raspeig. Este agente, destinado en el aeropuerto de El Altet, fue apresado junto a otras cinco personas en la operación antidroga.
En los tres casos las detenciones de guardias civiles han sido realizados por el propio Instituto Armado, lo que demuestra la tolerancia cero de los mandos con la corrupción interna.
