El sindicato CSIF ha denunciado la merma de la plantilla del centro penitenciario de Fontcalent debido a que desde la dirección se está obligando a los trabajadores a coger ahora los días de vacaciones que les restaban del año pasado. Una situación en la que se encuentran la mayoría de los funcionarios debido a que durante el estado de alarma se suspendieron las vacaciones y permisos.

La falta de trabajadores en cada turno "se ve agravada además por el hecho de las numerosas bajas a causa del covid-19, que se suman a las que se producen por otros motivos", afirma el sindicato. De este modo, en la actualidad hay 17 trabajadores de la cárcel de baja afectados por covid o cuarentena.

CSIF advierte de que la situación ha llegado a tal extremo que el pasado lunes "en uno de los módulos había solo dos funcionarios y en otro, el mas conflictivo, el numero 4, había uno".

Por ello, desde el sindicato se ha solicitado a Instituciones Penitenciarias que se amplíe el plazo para el disfrute de los días de vacaciones que restan del año pasado, "sin haberse obtenido respuesta aún a esta petición".

Además, desde CSIF se ha solicitado también que dado que las instituciones penitenciarias están consideradas como un servicio esencial se debe administrar la vacuna contra el covid-19 a sus trabajadores a la mayor celeridad posible.