El brote de covid que afecta a la prisión de Villena se mantiene activo y se ha extendido al módulo de mujeres, donde una interna ha dado positivo y se está pendiente de saber si hay más contagios entre las otras 53 reclusas del departamento, según ha informado en un comunicado la asociación profesional de trabajadores penitenciarios "Tu abandono me puede matar” (TAMPM), colectivo que alerta de que el centro se encuentra "en una situación sanitaria crítica" por el coronavirus y por ahora hay confirmados 88 positivos entres el millar de presos.

Esta oleada de contagios ha obligado a "cerrar" la prisión al exterior e incluso la cafetería ha tenido que ser clausurada al dar positivo en covid una trabajadora. Según TAMPM, también han quedado clausuradas las actividades de internos en zonas comunes, las comunicaciones de todo tipo como "vis a vis" o locutorios y solo se pueden realizar llamadas telefónicas en los departamentos donde se permite al interno salir de su celda. Seis módulos o departamentos de la prisión están en “aislamiento sanitario preventivo” y no se permites realizar llamadas desde las cabinas de teléfono que están situadas junto a la oficina del funcionario.

TAMPM, que afirma que cuenta con 180 socios entre los 400 funcionarios de la plantilla de Villena, afirma que van a pedir esta semana al director que ordene sacar las cabinas de teléfono de los internos fuera de la oficina de los funcionarios, tanto para velar por la intimidad de los internos cuando hablan con sus familiares y de los funcionarios, como para proteger a los trabajadores de posibles contagios por aerosoles. La asociación indica que la oficina donde trabajan los funcionarios es un búnker de seguridad estanco y sin ventilación. La única que hay entra por la ventana por donde los internos acceden a las cabinas metiendo el brazo para coger el teléfono y marcar.

Oficina de los funcionarios donde están los teléfonos que usan los internos. INFORMACIÓN

La asociación también denuncia que el actual protocolo de prevención de riesgos laborales elaborado por el Ministerio de Interior para las prisiones no está funcionando y no se ajusta a la realidad, ya que determina que "a los funcionarios de prisiones no se les debe hacer test PCR cuando ha dado positivo un interno con el que ha tenido contacto en el trabajo, ya que se presupone que si todos, incluidos los internos llevamos mascarilla y no estamos sin ella mas de 15 minutos, o a metro y medio de distancia, no habrá peligro de contagio". Califican el protocolo de "un insulto y una nueva humillación" y recuerdan que hay internos que continuamente se aproximan muchísimo a los funcionarios "sin mascarilla para consultarnos, y pese a que les advertimos que deben portarla para hablar con nosotros, el posible contagio en esos momentos es más que probable", señala TAMPM, que no entiende que se nieguen a realizar la PCR a los funcionarios que han prestado servicio con internos contagiados.

Desde Instituciones Penitenciarias recuerdan que el protocolo lo marca Salud Pública y afirman que para que se considere un contacto estrecho la persona debe haber estado a menos de dos metros del contagiado y durante más de 15 minutos con él sin usar medidas de protección a lo largo de 24 horas.

El último contagio conocido en la prisión de Villena se detectó este lunes y es una interna que salió al hospital a una operación hace unos días. En el test previo a la operación dio negativo, pero en uno posterior que se le hizo en la prisión dio positivo.

Situación en la que se encuentran la cárcel de Villena por el covid. TAMPM

TAMPM resalta que la atención sanitaria a la población reclusa es "mas que excelente y la realiza el personal sanitario del centro penitenciario", pero denuncian que "a los trabajadores nos dejan totalmente abandonados y olvidados por completo, teniendo que mendigar a la dirección del centro la realización de tests PCR para trabajadores expuestos a internos infectados y que sistemáticamente nos deniega Salud Pública de la Comunidad Valenciana".

La asociación denuncia la "desastrosa gestión sanitaria que está llevando la Secretaria General de Instituciones Penitenciarias en esta materia, siendo la encargada por delegación de gestionar la realización de test y rastreos a los funcionarios de Prisiones". Señalan que han suscrito un convenio con una mutua, pero "está desaparecida y no atiende a los funcionarios". Añade la asociación que "o nos hacen test preventivos y no hay un protocolo de fechas para la vacunación de trabajadores y de internos".

TAMPM pide al Gobierno que adopte medidas de control y prevención en todas las prisiones y que aclare los protocolos de prevención y control en sospechosos de positivos entre la plantilla de trabajadores. También reclaman que se establezca un calendario de vacunación para los trabajadores y para los internos, "ya que las prisiones son un entorno cerrado pero de mucho contacto, donde si entra el virus de manera virulenta pueden ser nefastas las consecuencias".