Audiencia de Madrid

Cuatro años y medio de prisión por conducir borracho y matar a una niña de 12 años y a su madre

Durante el juicio, celebrado este lunes, el hombre ha reconocido los hechos

La fiscalía pedía 6 años, pero se ha alcanzado un acuerdo de conformidad

Juicio al hombre que conducía borracho y mató a una mujer y una niña en Móstoles.

Juicio al hombre que conducía borracho y mató a una mujer y una niña en Móstoles. / CASO ABIERTO

Tamara Morillo

Tamara Morillo

Se llama A.P.A. y este lunes se ha sentado en el banquillo de la sección 17 de la Audiencia Provincial de Madrid. Conducía borracho. Cuadruplicaba la tasa de alcohol y se llevó por delante la vida de Marta, 40 años, y una de sus dos hijas con tan solo 12 años. Las partes han acordado una pena de prisión de cuatro años y seis meses.

A.P.A en la sala de juicio antes de alcanzar el acuerdo.

A.P.A en la sala de juicio antes de alcanzar el acuerdo. / CASO ABIERTO

Los hechos

21.30 horas del 1 de diciembre de 2022. Marta, junto a sus hijas de 12 y 9 años, se suben al coche. Cinturones abrochados, todo en aparente calma. La mujer, mira por el retrovisor y arranca. Su coche está aparcado en batería en una calle de Móstoles. Se empieza a incorporar, no viene nadie. En cuestión de segundos se le fue la vida.

Un fogonazo, y un fuerte movimiento. Un gran impacto. Marta murió en el acto. Su hija de 12 años también. Dentro del vehículo, desplazado sin control, la única que sobrevive es la menor de nueve años. Nada puede hacerse por su madre y su hermana cuando llegan las ambulancias. Hora de la muerte: 21:40 horas. La causa: un impacto "frontolateral" con otro vehículo mientras Marta maniobraba, salía del estacionamiento, y se incorporaba a la calzada. El vehículo con el que impacta iba más de 130 km/hora en una vía urbana. Su conductor ha bebido. Tras hacerle el control, da positivo en drogas y en alcohol cuadruplica la tasa.

Este lunes se sentaba ante el juez, delante de la familia de Marta. Lo hacía acusado de dos homicidios por imprudencia grave, un delito de lesiones por imprudencia grave, un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas y drogas y un cuarto delito de conducción temeraria. La fiscalía le pedía seis años.

Dos bomberos inspeccionan el coche de A.P.A., justo después del siniestro.

Dos bomberos inspeccionan el coche de A.P.A., justo después del siniestro. / EMERGENCIAS MADRID

Alcohol y drogas

Tras el impacto, A. P. A. permanece en el lugar de los hechos. No tardan en llegar los servicios de emergencia. Marta y su hija mayor yacen sin vida. La pequeña está en shock. Los agentes de Policía Municipal se acercan él. A simple vista, recoge el atestado policial, tal y como se considera probado en este juicio, "tiene síntomas externos compatibles con la ingesta de bebidas alcohólicas". A.P.A, según apunta la fiscalía y describen los agentes, tiene una fuerte halitosis alcohólica. Sus movimientos son lentos, no mantiene la verticalidad, "su habla era pastosa y repetitiva".

El informe da más datos. "También apreciaron síntomas de estar bajo los efectos de drogas o sustancias estupefacientes". Hablan de "cara y nariz muy enrojecida, aparición de nistagmos, habla titubeante y mal articulada, repitiendo frases o ideas, sin parar de hablar". Aseguran que A.P.A. "no sabía determinar la hora que era, presentaba oscilaciones de la verticalidad del cuerpo, perdía el equilibrio, se movía con movimientos descoordinados o mala coordinación de los ojos y las manos". 

El test de alcoholemia del conductor arrojó cifras escalofriantes:  0,96 mg por litro de aire aspirado, que bajó en la segunda medición que le practicaron a 0,94. A.P.A. fue puesto a disposición policial. Entró en prisión provisional un día después. Hasta hoy no había salido.

Conducción temeraria

Alcohol, drogas y alta velocidad. Las pesquisas policiales arrojan una velocidad de impacto de entre 131,4 km/h y 144 km/h, muy superior a límite genérico de velocidad, 50km/h, en casco urbano. Circulaba “de modo temerario” por la Avenida de Extremadura de Móstoles al volante de un vehículo de su propiedad después de haber ingerido bebidas alcohólicas y drogas toxicas. Y lo hacía “a velocidad superior a la permitida en vía urbana y cometiendo infracciones de tráfico”. Antes entrar en la calle en la que se produjo el impacto, fue visto en una rotonda. "No salió por la salida reglamentaria, sino que lo hizo girando directamente a la izquierda en sentido contrario de la circulación, con grave peligro de colisionar con varios vehículos que circulaban por en el sentido correcto”.

Cuatro años y seis meses de prisión y la retirada del carnet de conducir. En concepto de responsabilidad civil se ha fijado una indemnización por el fallecimiento de la madre y la hija de 455.685 euros.