Investigación

Investigan la muerte por asfixia de un sacerdote en su piso de Valencia

El portero de su finca ha encontrado el cuerpo este martes tras ser advertido por un conocido de la víctima

Alguien envió un último mensaje desde el teléfono del canónigo de la Catedral, de 77 años, diciendo que se iba de viaje

Hallan muerto con signos de asfixia al canónigo de la Catedral de Valencia

Agencia ATLAS / Foto: Daniel Tortajada

Teresa Domínguez

Agentes del grupo de Homicidios de la Policía Nacional de Valencia investigan la muerte de un sacerdote en su piso de la calle Avellanas número 22, muy cerca del edificio que alberga el Arzobispado, cuyo cuerpo sin vida y con señales de una posible asfixia ha sido encontrado a media mañana de este martes. El fallecido es Alfonso López Benito, de 77 años de edad, uno de los canónigos de la Catedral de València, cargo para el que fue designado en 2015 por el entonces arzobispo, el cardenal Antonio Cañizares.

El cuerpo sin vida ha sido localizado gracias a una llamada del portero del edificio, quien ha accedido a la vivienda con su llave, en compañía de un conocido del cura que le ha pedido ayuda porque la víctima llevaba días sin responder a sus llamadas. Al entrar, han encontrado el cuerpo sin vida del sacerdote sobre su cama y con señales compatibles de haber muerto como consecuencia de una asfixia, cuyo origen aún está por determinar.

¿Quién envió su último mensaje?

Según la información que maneja la Policía Nacional, el fallecido, o alguien haciendo uso de su teléfono móvil, habría enviado un mensaje advirtiendo de que iba a estar fuera una semana, mensaje que ahora rastrean los investigadores ante la forma en que ha sido encontrado muerto.

El cuerpo está siendo inspeccionado por la forense de guardia, y en breve será levantado y trasladado al Instituto de Medicina Legal (IML) de València para realizarle la autopsia, labora que posiblemente no se acometerá hasta el miércoles.

Además, agentes de la Policía Científica están inspeccionando la vivienda, en busca de huellas u otros vestigios de una segunda persona posiblemente implicada en la muerte de Alfonso López, natural de València, donde ha desempeñado buena parte de su labor sacerdotal.

Alfonso López Benito fue canónigo desde 1999 de la colegiata-parroquia de San Bartolomé Apóstol y San Miguel Arcángel, en la ciudad de Valencia. Ordenado en 1969, era doctor en Derecho Canónico por la Pontificia Universidad Lateranense, de Roma.

Fue párroco en varias localidades y profesor en el Instituto de Estudios Jurídicos de Valencia y en la facultad de Derecho Canónico. Ha trabajado en el Tribunal Eclesiástico de la archidiócesis de Valencia y es autor de varios libros.

El Arzobispado lo lamenta

Por su parte, el Arzobispado de Valencia ha emitido un comunicado en el que se limita a decir que "ha tenido conocimiento del fallecimiento de Alfonso López Benito, canónigo emérito de la Catedral de Valencia, a través de la Policía Nacional y los medios de comunicación" y que "lamentamos este triste fallecimiento y estamos a disposición de las autoridades por si la colaboración del Arzobispado pudiera servir para el esclarecimiento de los hechos".