Un guardia civil en la reserva, detenido en la redada de Formentera por explotación sexual y tráfico de drogas

La operación que realizaron el pasado martes en Formentera el Servicio de Asuntos Internos, la Unidad Central Operativa (UCO) y Policía Judicial de la Guardia Civil dio como resultado la detención de un guardia civil en la reserva que, presuntamente, se dedicaban a la explotación sexual y al tráfico de drogas entre los clientes de las mujeres explotadas.

La Oficina de Prensa de la Comandancia de Baleares de la Guardia Civil, confirmó las detenciones que se efectuaron el martes.

Se acusa a este agente, que nunca ha trabajado en Formentera ni en Ibiza (su última actividad profesional fue en Palma), y a su pareja de los presuntos delitos de "explotación sexual, contra la salud pública (por tráfico de cocaína), blanqueo de capitales y por omisión del deber de perseguir el delito".

Durante los registros, que se realizaron el pasado martes en el edificio Mirada II de la calle Tramuntana de la localidad de es Pujols, fueron incautados "unos 2.000 euros en metálico y unas 12 dosis de cocaína listas para su distribución, y varios aparatos electrónicos", según fuentes de la Guardia Civil.

Los agentes que intervinieron entraron, con orden del Juzgado de Instrucción número 4 de Ibiza, en seis apartamentos que registraron acompañados de una unidad canina y un operativo de unas 20 personas que actuaron de paisano y que conducían vehículos sin identificar. La operación comenzó a las nueve dela mañana y concluyó a las doce del mediodía del pasado 9 de abril.

Una vez que los detenidos fueron puestos a disposición judicial, el magistrado los dejó en libertad sin fianza, hasta la celebración del juicio, al entender que no existe riesgo de fuga, aunque no han trascendido las condiciones.

Esta actividad de prostitución en la localidad de es Pujols, que se desarrollaba tanto en invierno como en plena temporada, era conocida desde hacía años.

Investigación

De hecho, la Guardia Civil de Baleares fue la que inició la investigación hace meses relacionando la actividad con la explotación sexual de mujeres y el tráfico de estupefacientes.

Al constatar que estaba implicado un guardia civil en la reserva se recurrió al Servicio de Asuntos Internos y a la UCO para ‘reventar’ la operación, en el argot policial, con la práctica de los citados registros en los apartamentos, donde se ejercía la prostitución, tras meses de investigación.

Teniendo en cuenta que el local de referencia de esta actividad en es Pujols, Kentucky, llevaba cerrado desde marzo de 2020, con la pandemia, la actividad de prostitución se había desplazado directamente a los apartamentos situados en el edificio Mirada II.

No obstante, existen en los alrededores varios bares en los que se producían las citadas previas entre puteros y mujeres explotadas para luego subir a los apartamentos que registró la UCO.

Varios testigos presenciales de la operación, desplegada por la Guardia Civil en la mañana del pasado martes, aseguraron que vieron como fue detenida la gerente del exlocal de alterne, de nacionalidad rumana, y su pareja habitual, el guardia civil en la reserva. El detenido fue Policía Judicial, así como miembro del Equipo contra la Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil. Las primeras referencias de su llegada a Formentera fue para desarticular una organización de narcotraficantes, en abril de 2010, que fueron detenidos en noviembre de ese año en la denominada operación ‘Tristón’.

El ahora detenido y puesto en libertad pidió entonces una excedencia, aunque residía en Palma, pero viajaba asiduamente a Formentera. A lo largo de esos años la Guardia Civil mantuvo una investigación sobre sus actividades, pero se desconoce si anteriormente se tomaron medidas disciplinarias contra él.

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