La Guardia Civil ha detenido en Rojales y en Torrevieja a dos jóvenes de 27 y 24 años acusados de una oleada de cinco atracos a joyerías a punta de pistola que fueron cometidos el pasado verano en la Vega Baja. Los asaltantes, que además de una pistola también portaban un martillo para amedrentar a sus víctimas, se apoderaron de un botín de unos 280.000 euros entre joyas y algo de dinero en efectivo.

Los dos detenidos, uno de ellos defendido por el abogado José Soler Martín, ingresaron el pasado mes en prisión preventiva tras pasar a disposición judicial en Torrevieja. Uno de los apresados está acusado de uno de los robos y el otro de cinco asaltos a joyerías y de otro a una vivienda donde sustrajo también un coche usado para los atracos.

El Equipo de Policía Judicial de Torrevieja, encargado de la investigación, ha recuperado alguna de las joyas sustraídas, 1.650 euros, un coche robado en una vivienda que usaba uno de los asaltantes en los atracos, un revólver simulado y un hacha, así como otros efectos que les identifican como implicados en los robos con intimidación esclarecidos. El hacha ha podido ser empleada en hechos delictivos, pero en las denuncias de las cinco joyerías asaltadas en la Vega Baja las víctimas solo hablan de una pistola y un martillo.

Joyas recuperadas por la Guardia Civil de Torrevieja.

Los investigadores han averiguado, por datos aportados por las víctimas y comerciantes de las zonas donde actuaban, que antes de cometer los atracos estudiaban el lugar e incluso entraban en las joyerías simulando interés en comprar alguna pieza, cuando en realidad lo que hacían era analizar las medidas de seguridad del establecimiento.

El primero de los atracos fue cometido el pasado 20 de julio en un taller de joyas de Pilar de la Horadada. Dos asaltantes llamaron al timbre de la joyería y tras abrirles la puerta entraron y sacaron una pistola y un martillo para intimidar al propietario. Los atracadores se apoderaron de joyas valoradas en unos 12.000 euros y se dieron a la fuga.

La Guardia Civil de Torrevieja traslada a uno de los detenidos.

El 1 de agosto se cometió un nuevo asalto en una joyería de Torrevieja. En esta ocasión solo entró una persona en el establecimiento. Portaba una pistola y una bolsa de rafia que luego usó para guardar el botín. Una de las víctimas estaba con un cliente y cuando salió el dueño de la trastienda el asaltante le dijo que se tirase al suelo. No le hizo caso pero no dejó de apuntarle con la pistola y le intimidó para que le abriera el mostrador con el fin de apoderarse de media docena de bateas con joyas valoradas en 56.000 euros.

Arma simulada intervenida por la Guardia Civil de Torrevieja. INFORMACIÓN

Este mismo atracador reapareció el 18 de agosto en una joyería de Pilar de la Horadada, donde también esgrimió un arma de fuego corta para amenazar al dueño del comercio y a sus dos hijos. El asaltante se apoderó de 6.250 euros entre joyas y dinero y tras huir y presentarse en en el local la Guardia Civil la víctima aseguró que el ladrón había estado dos días antes en la joyería con la excusa de preguntar por unas cadenas de oro.

El 31 de agosto fue denunciado otro robo con violencia en una joyería de Torrevieja. El asaltante bloqueó la puerta con una bolsa de rafia para que no se cerrara y tras encañonar a dos personas huyó con joyas valoradas entre 150.000 y 200.000 euros. Al huir fue perseguido en la calle por un testigo que le vio subir a un coche e intentó evitar que se escapara bloqueando el paso con un contenedor de basura. El asaltante se escapó pero se cayó la matrícula del coche, vehículo que apareció luego aparcado en una calle de Torrevieja y que figuraba como sustraído a finales de julio en una vivienda del municipio torrevejense.

La oleada de atracos continuó el 9 de septiembre en un centro comercial de Ciudad Quesada en Rojales. En esta ocasión volvieron a actuar dos atracadores armados que sustrajeron un botín de casi 6.000 euros, entre joyas y algo de dinero en efectivo, y también colocaron una bolsa de rafia para que no se cerrara la puerta de local mientras ejecutaban el asalto.

Los investigadores, que seguían el rastro a los autores de la oleada de atracos, lograron detener tres días después del robo en Ciudad Quesada a uno de los implicados, que residía en una casa de Rojales donde ocasionalmente dormía a veces el otro implicado, con domicilio en Torrevieja. El segundo implicado fue detenido el pasado 20 de septiembre por la Guardia Civil.