Programa piloto para introducir la inteligencia artificial en los juzgados de Alicante

El plan consiste en la utilización de las nuevas tecnologías para agilizar la tramitación de los concursos de acreedores que se tramitan en los órganos de lo Mercantil de la provincia, que han registrado 900 solicitudes en lo que va de año

Imagen de archivo de la instalación de ordenadores en uno de los juzgados de lo Mercantil de Alicante antes de su puesta en marcha.

Imagen de archivo de la instalación de ordenadores en uno de los juzgados de lo Mercantil de Alicante antes de su puesta en marcha. / Pilar Cortés

J. A. Martínez

J. A. Martínez

La inteligencia artificial prepara su desembarco en los juzgados de Alicante en un plan piloto que se pondrá en marcha en los juzgados de lo Mercantil, según han confirmado a este diario fuentes del Palacio de Justicia. Una iniciativa que podría dar un vuelco a los métodos de trabajo que se usan en el Palacio de Justicia para agilizar la tramitación procesal. Y es que una de las quejas más comunes en la Administración de Justicia es la de tener que trabajar con medios del siglo XIX en pleno siglo XXI, donde los retrasos tecnológicos están a la orden del día.

El programa se va a empezar a aplicar de manera experimental en los juzgados de lo Mercantil para los concursos de acreedores para las personas físicas. Un tipo de procedimiento que se ha disparado en los últimos años, desde que empezó a dar bandazos la situación económica a raíz de la pandemia. Algunos particulares agobiados por no pagar las deudas ante la caída de los ingresos económicos acudieron a despachos de abogados especializados en saldar todas las deudas. En lo que va de año, se han presentado un total de 900 procedimientos de concursos de acreedores que tienen desbordados a estos juzgados.

"Se trata de procedimientos muy complicados y farragosos por la gran cantidad de documentación que se debe de manejar y que procede de fuentes muy diversas", explicó a este diario el juez decano de Alicante, César Martínez. El proyecto consistiría en la recopilación y la verificación de la documentación en manos de la inteligencia artificial. La provincia cuenta con tres juzgados de lo Mercantil en Alicante, más otro en Elche; a los que se suma la Sección Octava de la Audiencia que se encarga de resolver los recursos de las resoluciones que se dictan en dichos órganos.

En estos momentos, los juzgados de lo Mercantil, la Conselleria de Justicia y la Dirección General de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (DGTIC) están ultimando con una empresa multinacional el uso de esta tecnología para tratar de agilizar la tramitación de los procedimientos.

La idea es aplicarlo a los concursos de acreedores, pero con la perspectiva de poder empezar a aplicarlos a otro tipo de asuntos y de jurisdicciones. Aunque esto dependerá de los resultados que arrojen estos primeros trabajos.

Control de antecedentes

La presidenta del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, Pilar de la Oliva, ya subrayó la importancia de estas nuevas tecnologías para la modernización de la Justicia. "Solo en 2021, gracias a esta herramienta, se cancelaron de oficio 242.000 antecedentes penales en toda España, lo que benefició a 230.000 justiciables y ahorró 7.000 horas de trabajo de funcionarios, según datos del Ministerio de Justicia", aseguró durante su discurso de apertura del año judicial. Aunque esta realidad casaba muy mal con el retraso de los juzgados en la llegada de las nuevas tecnologías. Muy retrasados en la implantación de las nuevas leyes para la organización de la oficina judicial, así como para la desaparición del papel para su sustitución por el expediente digital. 

 De la Oliva ponía durante su discursos los pies en el suelo para indicar lo lejos que estaban los juzgados de la Comunidad de esas modernidades tecnológicas. "Antes de que lleguemos a ese futuro más o menos cercano, tenemos que mejorar las herramientas tecnológicas e informáticas con las que ya contamos", dijo. Y daba ejemplos de algunos de los puntos flacos. "Necesitamos urgentemente un nuevo sistema de gestión procesal, pues los intentos de sustituirlo hasta ahora no han dado los resultados esperados. También necesitamos sistemas informáticos que nos permitan relacionarnos con otras administraciones y que los sistemas de videoconferencias funcionen correctamente, a fin de evitar retrasos y costosos gastos para la Administración", señaló. Uno de los problemas que tienen los juzgados es la incompatibilidad de sistemas a la hora de contactar con los ordenadores de otras comunidades autónomas.

El Ministerio de Justicia cuenta con varias herramientas que usan la inteligencia artificial para facilitar y agilizar el trabajo de los juzgados, aunque se trata de herramientas que por el momento no están al acceso de los juzgados alicantinos. "Aquellas comunidades que no tienen las competencias transferidas suelen disponer más rápido de estas tecnologías", señalaba a este diario una letrada de la Administración de Justicia. "Seguimos anotando palitos para llevar las estadísticas", dijo.

Entre los usos que ya están dando algunos juzgados españoles a la inteligencia artificial se encuentran la anonimización de las resoluciones judiciales para que éstas puedan ser de consulta pública sin desvelar datos personales; la clasificación de documentos; la textualización de las vistas; las subastas; las notificaciones electrónicas o el cálculo para las acumulaciones de condenas. 

Factor humano

El que fuera presidente de la Audiencia de Alicante y actualmente magistrado del Supremo Vicente Magro aseguró a este diario que la inteligencia artificial ofrece numerosas posibilidades para la Administración de Justicia, aunque no debe de olvidarse de que se trata de una herramienta que no está exenta de errores y que por lo tanto es imprescindible que haya un control humano.

A juicio de Magro, supondría una gran ayuda a la hora de tratar de localizar jurisprudencia. "Desde el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial dedicamos mucho tiempo a recopilar información sobre sentencias de crímenes machistas. A veces estas herramientas pueden agilizar mucho el trabajo", señaló. Asimismo incidió en que el control de la reincidencia, los plazos de prescripción son otros asuntos en los que la inteligencia artificial podría suponer una gran ayuda al ser capaz de recopilar gran cantidad de datos de manera veloz.