E l Ayuntamiento de San Miguel de Salinas volvió ayer a basarse en un informe del año 2003 efectuado por la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), siendo el comisario de Aguas José Alemán, en el que respondió al Consistorio que, tras la documentación aportada el jefe del Servicio de Ingeniería Fluvial, no se apreciaba afección de ningún cauce público en el desarrollo del plan parcial Los Invernaderos, en relación a la rambla de La Escribana.

El Consistorio respondía así a las denuncias presentadas por IU ante el Gobierno central respecto a la invasión de 30.000 metros cuadrados de suelo público perteneciente a la CHS en el plan parcial SUS-A «Los Invernaderos» por parte de un promotor y donde solicitó al Ministerio de Medio Ambiente medidas para impedir la ocupación del citado suelo, correspondiente a la Rambla de la Escribana.

Además del informe de la CHS indicando que, según la información de la que dispone, «no se aprecia afección a ningún cauce público», fuentes del gabinete de prensa del Ayuntamiento aseguran que el plan parcial puede ocupar el suelo de la Escribana por tratarse de una cañada y no una rambla, tal y como, aseguran, les ha confirmado la Confederación.

Sin embargo, existen otros informes emitidos más tarde por el organismo de cuenca que contradicen el anterior a los que ha tenido acceso este diario. Tras una denuncia presentada por la Asociación de Vecinos, la CHS ratificó que en la zona afectada por un cauce es suelo era público. Así lo ratificó también el Consell en la Declaración de Impacto Ambiental, publicada en el DOGV en julio de 2005, donde cita que «el dominio público que constituye la rambla conocida como Cañada de al Escribana deberá ser reconocido como tal y clasificarse como suelo no urbanizable de especial protección. Esto implica que no podrá obtenerse aprovechamiento alguno para el sector». Sin embargo, el urbanizador ha computado como suelo privado los 30.000 metros cuadrados de suelo público, lo que permitirá ahorra el mismo número de metros en cesión de zonas verdes y aumentar la edificabilidad en 250 viviendas.

Para Ángel Sáez, la rambla no es rambla sino cañada, y ayer, explicaba a este diario que cuando a CHS se contradijo a sí misma, el proyecto de urbanización ya estaba bastante avanzado. El Consistorio ha recurrido el nuevo informe de Confederación que obliga a la recuperación del espacio público.

A su vez, el actual comisario de Aguas, Manuel Aldeguer, indicó que ha ordenado el proceso de deslinde porque sí hay suelo público y estudiará la posibilidad de llegar a un contencioso con el gobierno municipal.