Efectivos de la Guardia Civil especializados en la lucha contra la delincuencia organizada llevaron a cabo ayer en la ciudad de Torrevieja una espectacular operación para desarticular una banda latina, conocida como "Blood" (sangre en inglés), a la que se vincula con numerosas actividades ilícitas, como tráfico de drogas, extorsión y robo a personas y viviendas, según los datos recabados por este periódico. Los "Blood" -o "Hermanos de sangre", como apuntan otras fuentes que se denominaría a este grupo- serían una escisión de los "Latin King" probablemente nacida después de su desarticulación en la comarca. Ahora bien, su forma de actuar y organización les asemejaría en muchos aspectos a los "Latin King", según ha podido saber este diario de fuentes de la investigación que trabajaban en este asunto desde hace cerca de un año.

De las primeras investigaciones se ha podido vincular a miembros de esta banda con hechos delictivos cometidos el pasado año. Uno de ellos y que más sobresalto causó en Torrevieja, fue la brutal paliza que recibió un taxista, lo que movilizó a todo este sector del transporte que demandó en días sucesivos más seguridad a responsables locales y provinciales.

Más de veinte agentes venidos de Alicante o integrantes del cuartel de Torrevieja participaron en la denominada operación "Carpetazo", a través de la cual se ha desmontado uno de los grupos de delincuencia juvenil mejor organizado y preparado de la provincia, según aseguraron a este periódico fuentes de la investigación. Al cierre de esta edición había, al menos, 14 detenidos -tres de ellos eran menores de edad por lo que se informó a la Fiscalía del Menor-, aunque se sospecha que este grupo latino contaba con unos 40 miembros, principalmente radicados de Torrevieja, aunque con ramificaciones en otras poblaciones de la Vega Baja, caso de Orihuela, donde se han detectado en los últimos años otros grupos latinos similares, siempre según estas fuentes.

Meticulosa

La Benemérita planeó la operación de forma meticulosa para evitar que pudieran darse a la fuga alguno de los principales miembros de esta banda, perfectamente jerarquizada y donde cualquier desobediencia se paga muy caro. De este modo, las patrullas se apostaron cerca de dos de las principales viviendas de los cabecillas de la organización de forma simultánea y, bajo autorización judicial, los guardias civiles entraron a los inmuebles "a saco" y se encontraron con alguna resistencia a la hora de practicar los arrestos. Los guardias civiles iban pertrechados con pasamontañas y armas de fuego y actuaron con gran solvencia, según pudo constatar este periódico.

La actuación policial se inicio cerca de las 7 horas de la mañana aunque el operativo estaba en marcha desde las cuatro de la madrugada y se centró fundamentalmente en dos viviendas situadas en la calle Rojales y en una urbanización de la avenida de la Mancha. En este último lugar fue donde se detuvo al supuesto cabecilla de los "Blood", un joven de 19 años de edad. Cerca de allí hay una plaza, la de la Habana, que sería uno de los lugares de encuentro de estos jóvenes. En esta misma zona verde está el colegio Cuba. Los padres denunciaron el pasado año la presencia de bandas juveniles que prácticamente les obligaron a marcharse con sus hijos a otros jardines para evitar cualquier tipo de conflicto o altercado.

Junto a él fueron arrestados en la misma vivienda un hermano y uno de los lugartenientes que haría las veces de "ángel de la guarda" y prácticamente lo seguía a todas partes las 24 horas del día. Todos los detenidos en esta operación son jóvenes sudamericanos.

Fuga

La labor de la Guardia Civil para el registro de viviendas concluyó sobre las once de la mañana aunque, según pudo saber este periódico, varios integrantes de este grupo lograron burlar los controles y darse a la fuga.

De hecho, se decidió establecer una vigilancia en diversos lugares de la ciudad para tratar de localizarlos y cerrar la operación. Muchos ciudadanos se sobresaltaron ayer al comprobar cómo los agentes patrullaban por varias zonas del término municipal perfectamente pertrechados en los trajes de asalto. Los detenidos fueron trasladados a varios cuarteles de la Vega Baja para proceder a los interrogatorios pues uno de los principales objetivos de los investigadores eran aislarles para evitar de este modo que pudieran entrar en contacto y conocer qué es lo que había pasado.

El juzgado de Instrucción 1 de Torrevieja, que se encontraba de guardia, participó en el operativo y en los registros. Es más que probable que los detenidos no pasen a disposición judicial hasta mañana jueves mientras los responsables de la investigación proceden a compilar toda la información recabada.