Las calles de Orihuela amanecieron ayer limpias de vehículos en el centro del casco urbano tras ponerse en marcha la zona azul. Una imagen insólita. Los vecinos no quieren, de momento, pagar por aparcar y los visitantes hallan así una alternativa. El Ayuntamiento anunció ayer que las tarjetas para residentes estarán listas en enero.
