La normativa que aprobó ayer en una sesión plenaria el Ayuntamiento de Daya Vieja, que prevé multas de entre 750 y 3.000 euros por el ejercicio de la prostitución, tanto para las mujeres que se dedican a esta actividad como para sus clientes, encontró ayer una primera respuesta en las Juventudes del PSOE de Torrevieja. Los socialistas, en un comunicado, aseguran que el regidor, Rafael Vives, termina con este reglamento por "demonizar" esta actividad y otras, caso de la pobreza, porque la norma marco que aprobó la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, que es en la que se apoya el Ayuntamiento de Daya Vieja, prevé sanciones de 400 euros por "dormir en la calle".

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Para los socialistas, el problema no es la prostitución porque estas mujeres "son las principales víctimas" y se aboga por perseguir a aquellos que la obligan a ejercer esta actividad y por apoyar a estas personas.

"Si el objetivo de Vives era mejorar la vida de sus conciudadanos -asegura por último el PSOE en la misma nota- debería haber apostado por exigir la aplicación de la llamada Ley de Dependencia, paralizada por el Consell de Camps, así como por exigir una mayor inversión en recursos sociales".