El concejal de Calidad Ambiental, Ginés Sánchez, aseguró ayer que el agua vertida al río Segura desde las depuradoras de Orihuela está "correctamente depurada". Sánchez hizo estas declaraciones un día después de que el concejal de Los Verdes Manuel Gallud asegurase que la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) abrió expedientes sancionadores contra el Ayuntamiento por verter líquido "mal depurado" al cauce del río Segura.

De este modo, Sánchez explicó que el primero de los dos expedientes incoados por la CHS se debe a la toma de la depuradora de Rincón de Bonanza que recoge "las aguas muertas" del tramo final del azarbe de La Graya. El edil indicó que la CHS "entiende que esa toma no debe estar ahí", pero insistió en que la depuradora tiene capacidad para tratar esa agua "que baja contaminada". El líquido es devuelto al cauce "para que transcurra por el centro de la ciudad (de Orihuela)".

El segundo expediente se debe a la falta de licencia para verter agua depuradora procedente de la planta de Hurchillo-Arneva, puesto que el Ayuntamiento debería pagar al Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela "un canon equivalente a 300 tahúllas" para poder arrojar el agua al cauce. "Mientras yo sea concejal, este Ayuntamiento no pagará por devolverle a los agricultores un agua limpia y depurada, totalmente apta para sus cultivos", añadió el delegado de Calidad Ambiental.