El especial celo de los servicios técnicos municipales y el desgraciado accidente mortal de una mujer en el tren turístico han hecho que, de golpe y porrazo, hayan desaparecido tres de los servicios más populares de Torrevieja. Todo en dos semanas. Los trenes echaron el cierre el 9 de septiembre. Aunque la orden debería haberse hecho efectiva el 13 de agosto, momento en el que la junta de gobierno decidió dejar desierto el concurso. Sólo llegó a la Policía tras el accidente de la pasajera el 7 de septiembre, como denunció Alternativa Popular. Un caso similar fue el cese del servicio de embarcaciones. Los técnicos lo reclamaron en julio y la secretaria municipal insistió en junta de gobierno en agosto porque estaba realizando la actividad sin contrato desde mayo. Sólo se cumplió en la segunda semana de septiembre y tras el citado accidente.
La última atracción turística en caer de la lista ha sido la empresa que realizaba paseos en calesa tiradas a caballo - al estilo sevillano, folclórico y por 10 euros el pasaje-. En este caso se reclamó el 15 de septiembre el cese inmediato de la actividad del "servicio turístico de viajeros con tracción animal", inaugurado en abril de 2008, al parecer, por motivos similares a los anteriores.
